Futbolistas gorditos tendrán su mundialito, a partir del 3 de septiembre

A partir del 3 de septiembre, los futbolistas “pasados de peso” tendrán la oportunidad de mostrar sus habilidades en la cancha, pues ese día comenzará el Mundialito de los Gordos en donde jugadores de la Liga 2XL echarán competirán para coronar al “campeón mundial”, muy al estilo de la Copa Mundial de Qatar.

Hasta ahora han confirmado la edición del torneo con 20 equipos, con jugadores, todos, de talla extra grande.
Con un llamado a los gordos del sillón para que se levanten y vayan a las canchas, se presentó el evento, que dará inicio el 3 de septiembre.

Este evento nace de la iniciativa y deseo de un grupo de 4 amigos, quienes conformaron la Liga 2XL, con el objetivo de crear espacios inclusivos, donde se fomente el deporte, la sana convivencia, activación física y donde las personas de talla grande puedan competir y demostrar pasión y talento en balompié.

Ricardo González Alpuche, uno de los organizadores del evento recalcó que esta historia comenzó luego de darse cuenta de la falta de espacios para que las personas de todas las tallas “o que han sido banqueadas en otras ligas” tengan un espacio para disfrutar del deporte.

“Queremos que sea un encuentro de amigos y familia, un espacio para la diversión, donde todos se sientan incluidos y tengan un espacio para desarrollarse. Empezamos con el fútbol, aprovechando la pasión y el ímpetu por el mundial, pero queremos expandirnos y hacer de otros deportes más adelante”, dijo.

El Mundialito de Gordos demostró su gran poder de convocatorio, indicó Álvaro Carcaño, organizador del torneo, ya que, originalmente se esperaba la inscripción de 16 equipos, pero dado el gran interés de participar, el torneo estará confirmado por 20 equipos.

“Nos enfocamos en gordiatletas para darles este espacio para disfrutar y cada persona decide su equipo, deciden a que “país”. Los juegos serán todos los sábados de 5 a 7 de la noche en La Cancha”.

La gran final que está planeada para el día 3 de diciembre.

 

 

Texto y foto: Esteban Cruz Obando