El sur de Mérida quedó como mudo testigo de la potencia del sistema tropical “Grace”, el cual causó afectaciones en invasiones ubicadas en este sector de la urbe.
Decenas de personas que habitan en casas de cartón o madera pasaron horas críticas, cuando los vientos de más de 100 kilómetros por hora pusieron en peligro sus viviendas, muchas quedaron destruidas.
“Parte del techo de mi tiendita se cayó. Fue una experiencia terrible porque hay niños de por medio. Estábamos acá adentro, preocupados porque la casa no se cayera”, comentó Aurora García, quien habita en una invasión cercana al Roble Agrícola.
“Inclusive, las matas que están allá, la gente que pasa con coche lo tuvo que quitar porque se volaron con el viento”, apuntó.
En otro sector, conocido como “Alborada” las familias tuvieron que permanecer en sus hogares mientras pasaba el sistema tropical.
Un día después de la afectación, entre vecinos tuvieron que apoyarse para rescatar lo que quedó de sus casas, mientras otras personas buscaban surtirse de agua para poder pasar el intenso calor que siguió el paso del meteoro.
Hubo personas que pidieron apoyo a la sociedad para levantar de nuevo sus casas, mientras que otras solamente pugnaron porque las autoridades les brinden ayuda para recuperarse.