Integrantes del Consejo Ciudadano del Agua en Yucatán, se reunieron, ayer, en la Plaza Grande para manifestarse por la aprobación de una nueva legislación en la materia que priorice el abasto del vital líquido a la población por encima de los requerimientos de las industrias.
Los activistas encabezados por Cuauhtémoc Jacobo Fermat y Teresa Vaught Charruf, mencionaron que a nivel federal, el diputado, Rubén Muñoz Álvarez, pretende que se apruebe una iniciativa de Ley General del Agua, que afirman es la continuidad de la aprobada en el sexenio de Salinas de Gortari y que ha tenido graves repercusiones a lo largo de estos últimos años en perjuicio de la población, ya que concede muchos beneficios a la industria, situación que debe ser analizada a conciencia debido a las condiciones de sequía que a nivel nacional se presentan y que afectan al 60 por ciento del país.
Aseguraron que el diputado no ha permitido el acceso a la consulta de su iniciativa que deja intacta la actual ley de aguas nacionales que no cuenta con mecanismos para corregir y regular el sobreconesionamiento y acaparamiento.
En ese sentido, piden a las instancias que correspondan, preservar el vital líquido con una legislación que tome en cuenta aspectos consensados por agrupaciones activistas a nivel nacional: la Iniciativa Ciudadana de Ley General del Agua, la cual respaldaron con más de 198,000 firmas, y que incluyen aspectos como el respeto de la naturaleza; el respeto por el agua de pueblos y comunidades y su debida administración en los territorios; e inclusive contempla el derecho de vetar proyectos dañinos, y prohibir el uso del agua en proyectos de minería tóxica y fracking.
En febrero de 2020, dicha iniciativa, fue presentada por la Coordinadora Nacional “Agua para todos, agua para la vida”, de manera simultánea, en la Cámara de Diputados y en la Cámara de Senadores del Congreso de la Unión, sin que a la fecha haya tenido algún avance.
En cuanto a Yucatán, donde aún se cuenta con agua se mencionó que existe una grave contaminación y sobre extracción del acuífero por permisos para el establecimiento de megaproyectos como mega granjas porcícolas y avícolas e industrias qué extraen tal cantidad de agua que en municipios aledaños las tuberías no tienen presión, ha disminuido el volumen en los pozos y que en ocasiones sale de estos maloliente y turbia.
Texto y foto: Manuel Pool