Informante señala que escuela apócrifa se dedicó a repartir las licencias a personas que no cumplían con los requisitos ni documentos necesarios para ofrecer los servicios; pide a la autoridad regulación
A partir de la publicación en la que Peninsular Punto Medio abordó el tema de los guías de turistas piratas, hasta la redacción se comunicó uno de estos trabajadores, quien aclaró que en su caso, cuenta con toda la certificación debida, y compartió algunos puntos de interés en torno al problema, que colude a numerosos guías extranjeros, que viven en Cancún y la Riviera Maya, y que portan gafetes, los cuales que dicen, les otorgó la Secretaría de Turismo Federal, trabajan como guías en Chichen Itza.
Muchos de esos extranjeros que prestan sus servicios como Guías, entre los que figuran chinos, rusos, alemanes, holandeses y belgas, iniciaron como intérpretes, explicó “Juan”, como le llamaremos a nuestro informante, quien pidió no revelar su identidad.
¿Cómo es posible que extranjeros obtengan esta certificación?, se pregunta nuestro entrevistado, pues dice que por cada una de estas credenciales apócrifas, los extranjeros pagan hasta 3 mil dólares, mientras que en el caso de los nacionales 40 y 50 mil pesos por la licencia federal.
Los resultados de estos actos de corrupción los paga la imagen de México, porque a falta de una debida regulación y una supervisión constante, no falta quienes inventen historias en los recorridos, como la de que los mayas jugaban fútbol en el campo de pelota, cuando se trataba de un ritual, así como acerca del origen del chicle, que tratan de explicar tomando como referencia un árbol de Álamo.
“Todo comenzó hace cinco años cuando a Pisté llegó de Cancún una persona llamada Daniel Quijano Oceguera, quien rentó un local para poner una escuelita de guías”, explicó “Juan”, quien reveló que, por curso se cobró 30 mil pesos a cada uno de los participantes, lo que incluyó hasta la entrega de certificados de secundaria y preparatoria, para quienes no carecían de los estudios básicos necesarios para tramitar la licencia Federal. La cuestión es que en el caso de los certificados de secundaria, algunos salieron como expedidos en escuelas de Sonora y Baja California, por lo que todo apunta a que eran apócrifas y por ende también las credenciales de guías.
Dijo que como resultado de la operación de esta “escuelita”, que en la actualidad ya se fue de Pisté salieron más de 300 guías, incluyendo amas de casa y muchachitos, quienes saturaron el mercado y que actualmentese se ponen a la orilla de la carretera, detienen los vehículos y ofrecer sus servicios.
Indicó que uno de ellos, atendió al turista que se quejó en las redes sociales de que le cobraron 900 pesos por 20 minutos de servicio y entre otras cosas exhibió su falta de preparación mencionando que en el juego de pelota, los mayas jugaban fútbol.
Explicó que el recorrido que ofrecen los guías que en verdad están bien preparados y que ofrecen un servicio de calidad, se divide dos partes, uno que abarca el sector en el que se encuentra el Castillo, el Juego de Pelota, el Templo de los Guerreros y el cenote sagrado y otro que incluye el Observatorio y la Casa de las Monjas.
El primero tiene una duración de mínimo hora y media y cuesta el servicio 800 pesos, mientras que por el recorrido completo que tarda más de tres horas se pagan 200 pesos adicionales.
Juan dijo que no hay que generalizar pues hay quienes se han preparado y dan un buen servicio, y pide a las autoridades hacer una revisión de las licencias.
Texto y foto: Manuel Pool / Cortesía