El Paquete Contra la Inflación y la Carestía aplicado por el presidente Andrés Manuel López Obrador no es suficiente, pues solo frena el alza de precios en 10 de los 24 productos propuestos, considera dirigente obrero
En opinión de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (Croc) Yucatán, el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pcic) implementado por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, ha sido insuficiente para frenar el constante aumento a los precios, ya que únicamente sólo 10 de los 24 productos propuestos consiguieron mantenerlos.
En entrevista con Peninsular Punto Medio, el dirigente de la Croc en la entidad, Pedro Oxté Conrado, consideró que el mandatario federal estuvo mal asesorado, ya que los industriales no le han cumplido y la inflación está por las nubes.
Pese a todos los esfuerzos por contener el encarecimiento de los precios, la inflación no logra ceder. Durante la primera quincena de julio del 2022, la tasa de inflación interanual trepó hasta 8.16%, un nuevo máximo no visto en dos décadas.
Oxté Conrado indicó que ellos mensualmente realizan un comparativo de precios de productos de la canasta básica en el supermercado y el mercado, “donde comprobamos el notorio aumento de los precios. Durante el primer semestre hubo un incremento del 5.5% en los precios de la canasta básica”.
Dijo que igual retomarán el muestreo que efectuaban como hace 10 años. El estudio también incluirá tres mudas de ropa para cada uno de los cuatro integrantes de la familia para que se tenga un mejor panorama de lo que se necesita ganar para sostener a una familia. “Muchas familias están haciendo un milagro para sobrevivir”, añadió.
Hay productos cuyos precios se han disparado como el aguacate, que ha aumentado 79.4%, la cebolla (56.8%), papa (49.3%), chile poblano (37%), calabaza (26.4%), pepino (23.8%), huevo (23.9%), pollo (17.5%) y carne de res (17.3%).
En México y el mundo la inflación se ha convertido en una de las preocupaciones principales en términos económicos y sociales. La escasez de materias primas, la turbulencia en cadenas globales de suministro, las alteraciones en los mercados laborales y la lenta recuperación pospandémica han llevado a los precios de los alimentos en el mundo a alcanzar sus niveles máximos históricos.
Aumento a la tortilla y Ucrania
Oxté Conrado manifestó que el aumento del precio de la tortilla es un “escándalo”.
“¿Por qué lo van a subir? Los molineros señalan que les suben el precio de la tonelada de maíz, que ya se encareció en Ucrania, hasta ellos ya son especialistas en los efectos de la guerra, igual sucede con el pan dulce, es un milagro que sobreviva el trabajador”, expresó.
De acuerdo a especialistas, actualmente el 38.8 por ciento de la población mexicana se encuentra en situación de pobreza laboral, es decir, que su ingreso laboral es insuficiente para comprar la canasta básica alimentaria para todos los miembros del hogar. Este nivel es aún mayor que antes de la pandemia, cuando era de 36.6 por ciento.
Debido a los efectos de la inflación en el poder adquisitivo, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) estima que este año la pobreza en México crecerá 2.3 por ciento, lo que representa a 2.5 millones de personas.
En el primer semestre del año, la canasta básica ha tenido en promedio un aumento del 20%, por lo que amas de casa optan por comprar menos alimentos y hacerlos rendir para la alimentación de sus familias, donde productos como la papa han tenido un aumento del 25 por ciento.
El plátano, de 18 pesos pasó a 22 el kilo; el huevo, de 35 pesos cuesta hasta 45 pesos el kilo; el tomate tuvo un aumento de precio de 17, a 24 pesos el kilo; las amas de casa optan por comprar menos alimentos y hacerlos rendir para la alimentación de sus familias, si antes se compraba el kilo de carne, ahora sólo adquirirán un medio o tres cuartos de kilo.
El dirigente croquista reconoció que la inflación se debe a factores externos, “es mundial, pero también el país tiene las condiciones para producir debe ser suficiente para su consumo, debe mirar hacia el campo, urge un programa efectivo para producir alimentos”.
Recordó que las personas que, como él, que crecieron en un municipio, en su caso en Temax, no estaban sujetas al dinero, pues existía el trueque, ya que se acostumbraba a criar gallos, pavos y gallinas que se solía intercambiar por azúcar y frijol. “Tu mamá te decía: junta 10 huevos y se lo llevas al de la tienda para que te dé azúcar”, relató.
Explicó que unos chinos le enseñaron a elaborar un abono con estiércol de caballo y sembraba rábano, cilantro y romana cuando esto crecía. “Con las gallinas que se tenía hacías un delicioso puchero, pero todo esto prácticamente se ha perdido. No faltaba el vecino que solía matar a tirahulazos al gallo porque siempre lo despertaba”, bromeó.
Indicó que actualmente en México hay déficit en maíz, trigo y carne de puerco. “Estamos sujetos a políticas erróneas, se debe hacer un acuerdo nacional para que no se politice la alimentación. El Gobierno federal no tiene una buena planeación en el campo, sus programas son más ocurrencias”, consideró.
Dijo que para que al obrero le alcance ha tenido que trabajar la mujer o, en su caso, el primero tiene que doblar turno o laborar horas extras, pero en ambos casos queda demostrado que tienen que esforzarse, pero se descuida mucho a los hijos, ya que estos los tiene que cuidar el vecino o la abuela.
Señaló que en las fábricas se da el fenómeno conocido como el “Síndrome de burnout o del trabajador quemado, que tiene una presión permanente, lo que les termina afectando la salud mental, debido a una mala planeación, pues a los dueños únicamente les importa la productividad”.
Texto y fotos: Darwin Ail B.
