Se presentó el Catálogo Nacional de Pueblos y Comunidades Indígenas, en el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, herramienta a través de la cual se reconoce a las comunidades mayas para poder respetar sus derechos colectivos.
Pobladores de Ixil indicaron que la inscripción de su comunidad en este catálogo tuvo que ser peleada, ya que las autoridades municipales se negaban a qué el municipio quedara registrado como pueblo indígena ante el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas
“Nos negaban el derecho que tenemos como pueblo de primero ser consultados antes de decidir si estábamos de acuerdo en que entren inmobiliarias o no. Fue cuando nos dimos cuenta que no estábamos registrados como pueblo indígena y fue cuando comenzamos con este proceso para evitar que pisoteen nuestros derechos”, dijo Cristina Chin, representante de la gente de Ixil.
Kinchil en lucha
Destacó que el caso de su municipio es interesante por la unión del pueblo indígena para ser reconocidos a pesar de las negativas de sus autoridades.
Por su parte Federico May, poblador del municipio de Kinchil, mencionó que para ellos hoy no hay mucho que celebrar, ante la situación que viven por situaciones de despojo y discriminación.
“Seguimos viviendo la misma historia de despojos, discriminación y falta de reconocimiento como comunidad autóctona o maya, amenazados en nuestro territorio, ya que cinco mil hectáreas de Kinchil hoy están siendo parceladas para que las inmobiliarias se apropien de ellas”, puntualizó.
Señaló que todavía se siguen pisando sus derechos y los recursos naturales de donde viven, lo que permite ecocidio en complicidad entre autoridades municipales y ejidales.
“Nosotros hemos seguido el ejemplo del municipio de Ixil para organizarnos. Ya realizamos nuestras asambleas comunitarias esperando ser reconocidos como pueblo indígenas y con nuestra forma de autogobierno.”, aclaró en rueda de prensa.
Los pobladores mayas recordaron que con la importancia de este respeto se busca la conservación de su identidad, recursos naturales, fuentes de empleo y modos de vivir tradicionales que se oponen a los intereses políticos y económicos de autoridades u otros sectores.
Texto y foto: Andrea Segura