Joven era discriminado por sus orígenes Mayas, hoy es llamado por la NASA

El joven Guillermo Adrián Chin Canché, del poblado de Bethania, Campeche, orgulloso de sus orígenes mayas, el cual tuvo que vencer varias adversidades de la vida, entre ellos, lo económico y la discriminación del que era objeto por su descendencia indígena, ahora es Astrobiólogo y trabajará para un proyecto de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, mejor conocida como la NASA.

En la actualidad, el joven es un ingeniero en mecatrónica por la Universidad Autónoma de Campeche y maestro en Ciencia y Tecnología del Espacio por el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica, y se encuentra en Ensenada, Baja California, donde próximamente estará viajando a los

Estados Unidos, para participar en el proyecto de “Dragonfly” de la NASA, en este evento 117 científicos de diferentes países estudiaran la astrobiología del satélite del planeta Saturno llamado titán.

Guillermo es el mayor de tres hermanos, siempre tuvo gran admiración por sus ancestros mayas, debido a que para él, los mayas eran excelentes astrólogos y tenían una gran exactitud de los movimientos de las constelaciones, con calendarios donde consideraban la Luna, el Sol y el movimiento de los planetas como Marte, para tener fechas aproximadas para las cosechas.

Fue a través de su trabajo realizado para su tesis, donde estudio al satélite más grande de Saturno, “Encélado”, otra de las lunas de ese planeta, lo que lo llevó a ser invitado por Scott Rafklin, para trabajar en el proyecto de “Dragonfly”, será el único mexicano y de origen maya que llegue a la NASA.

El proyecto de la NASA “Dragonfly”, planea estudiar la astrobiología del satélite del planeta Saturno llamado titán mediante una sonda que desplegará Drones, con la capacidad de perforar el suelo y obtener materia del lugar, además de analizar la atmósfera y tomar muestras de los océanos de metano para tener una mejor idea de la fisicoquímica que existe y como los parámetros biogeoquímicos pueden ayudar a formar sus propias formas de vida.