La Casa Amar, un espacio para restaurar a las infancias yucatecas

En Yucatán se registran 469.4 reportes de maltrato por cada 100 mil niños de la entidad. Se considera maltra- to infantil al daño físico, al abuso sexual, abandono, maltrato emocional, omisión de cuida- dos, negligencia y explotación.

Es por eso que existe Casa Amar, un espacio que busca restituir a las niñas y niños que son acogidos por medio de una intervención integral, todos los derechos que se hayan vulnera- do como resultado de la violen- cia y el descuido parental, en lo que se resuelve su situación ju- rídica y pueden integrarse a una familia.

¿Qué busca Casa Amar?

Ser un referente nacional de crianza positiva y con perspectiva de derechos de infancia cuyo impacto no se limite a las niñas y niños que reciban acogimiento temporal, sino ir un paso más allá, fortaleciendo a las familias adoptivas o a la red familiar.

Amar busca ser una casa de transición a la familia, dedicada a brindar atención integral a los niños y niñas que carecen de sus figuras parentales.

¿Cómo logran sus objetivos?

Lo que distingue a la fundación es su Modelo de Intervención Integral, conocido como Modelo LAN. Este modelo no es solo un concepto teórico, sino una realidad tangible y efectiva que ha sido adaptada y probada para garantizar que los niños acogidos tengan acceso a un mayor bienestar y disfruten de manera efectiva de sus derechos.

El Modelo LAN, el cual fue replicado de “La Alegría de los Niños IAP,” tiene una exitosa trayectoria de 28 años en ope- ración en Querétaro y ha sido seleccionado por la Fundación Amar para abordar las necesidades de la niñez vulnerada en Yucatán.

¿Cómo trabajan con las infancias durante su estancia?

En esta institución se trabaja arduamente para resolver su situación jurídica y, lo que es igualmente importante, prepararlos para su futura integración en una familia amorosa. Esta misión es un faro de ayuda en un mar de adversidades, ya que busca brindar a estos pequeños la oportunidad de un nuevo comienzo y un futuro más prometedor.

La Fundación Amar IAP está encabezada por la licencia- da Gina Ortega Joaquín (presidenta) y la psicóloga Ana Luisa Campa Díaz de León (directora), y tiene dos años trabajando en el estado.