La Familia Roche y su industria salinera, orgullo de Yucatán

La familia crea la Industria Salinera de Yucatán S.A. de C.V, líder nacional en producción de sales en grano para la industria y comercio del país.

Muy admirable es la manera en la que a partir del comercio de sal que se recolectaba en la ruta Sisal-Celestán a finales de la década de los años veinte, y que don Joaquín Roche Arce traía a Mérida para vender en su local de la Calle Ancha del Bazar, se haya levantado un emporio.

Para ello tuvieron un papel primordial sus hijos Joaquín y Roger Roche Martínez, quienes con la preparación profesional necesaria instalaron en Las Coloradas una planta refinadora que producía una sal blanca de alta calidad, la cual enviaban por vía marítima a Veracruz, y desde ahí por ferrocarril a los mercados de Puebla, Tehuacán y La Merced en la ahora Ciudad de México.

De acuerdo con el libro “La Sal en México, Volúmen 2”, del compilador Juan Carlos Reyes, el señor Florentino Díaz vendió a Joaquín Roche Martínez una camioneta con capacidad de 30 toneladas, mediante la cual surtían de mercancías los puertos y a su regreso traía la sal que se comercializaba desde Mérida. En aquellos tiempos funcionaban salineras en Xtampú, Chabihau, Mina de Oro y San Crisanto, en este último sitio tiempo después adquirió salineras la familia Roche.

Cabe mencionar que en ese entonces, la producción se obtenía mediante el método de evaporación solar, y de esta manera lograban de 30 a 60 toneladas que se enviaban a Tabasco y Veracruz.

En 1930, durante un viaje a la zona de Cabo Catoche, Joaquín Roche Martínez, acompañado de Antonio Bouza, conoció y adquirió Las Coloradas a don Antonio González, su entonces propietario; así, en 1946, los hermanos Roche Martínez fundaron la Industria Salinera de Yucatán S.A. de C.V. y al mismo tiempo comenzó el gran desarrollo del poblado que se apoyaba en las labores industriales.

Debido a la alta demanda de producto, se requirió de utilizar métodos más intensivos, por lo que mediante un crédito, en el año 1949, pudieron comprar la primera refinadora que trajeron de los Estados Unidos produciendo así una sal blanca y delicada como el azúcar.

Los incansables hermanos Roche crecían las salinas y abrieron oficinas en México y en Veracruz, además fundaron una compañía naviera que hacía la ruta Veracruz-Progreso. Por su parte, el señor Joaquín construyó el local del nuevo Campestre en la prolongación del Paseo de Montejo, realizó inversiones en los bancos y nunca dejó de ampliar su negocio.

En el aspecto familiar, Joaquín Roche Martínez contrajo matrimonio con la joven Amira Díaz Ruz, y el 12 de junio de 1932 vio la primera luz Joaquín Roche Díaz. El hijo mayor del matrimonio estudió en el Colegio Montejo y continuó su preparación en los Estados Unidos, graduándose como ingeniero químico en el Instituto Tecnológico de Massachusetts.

De regreso a Yucatán, además de que se dedicó a la construcción de nuevas plantas de la Industria Salinera, la cual cabe señalar a partir de 1957 era proveedora de sal industrial para la empresa Pennsylvania Company, misma que bajo la marca PennSalt estableció su planta productora de sosa y cloro en el Valle de México, el brillante ingeniero Joaquín Roche Díaz se dio tiempo para estudiar medicina en la UNAM, en la ciudad de México, y luego trabajó en el Hospital Psiquiátrico Infantil.

En el año de 1965, en la capital del país, contrajo nupcias con Beatriz Correa López, y de esta unión nacieron Alexandra, Joaquín y Luis Enrique.

Acerca de las actividades de este yucateco, hay que destacar que de 1970 a 1976 fue director de Promoción Industrial de Yucatán y en 1972 también fue titular del Fideicomiso de la Ciudad Industrial de Mérida. El 19 de noviembre de 1977, en segundas nupcias, contrajo matrimonio con Patricia Chami Urcelay, con quien procreó a su hijo Joaquín.

Para la década de los años 80 la producción de la salinera era de medio millón de toneladas al año y en la década siguiente aumentó a 750 mil toneladas al año.

Hoy en día, la Industria Salinera de Yucatán tiene el segundo lugar en México de las empresas que extraen la sal por medio de la evaporación solar, y es la líder nacional en la producción de sal de grano para la industria y comercio del país.

Texto y foto: Manuel Pool

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *