En esta misma columna escribí en una ocasión que es muy normal que cada vez que hay un cambio en la administración pública, el nuevo presidente, gobernador o alcalde se rodee de gente de su confianza para sacar adelante el trabajo.
Esto no es algo malo en sí mismo, y al final todo dependerá en sí los funcionarios cuentan con la capacidad adelante sus encomiendas.
Es por tal motivo que si en el sexenio de Rolando Zapata Bello vimos a la generación del 86 de la Prepa 1 de la Uady, conformada por Víctor Caballero, Marco Celis Quintal, Celia Rivas y Ariel Aldecua Kuk, ahora le toca a otra camada de políticos que tomen por asalto el gobierno estatal: la Generación Marista de Mauricio Vila.
Si embargo, cabe señalar que a diferencia de Rolando Zapata que colocó a sus amigos de la Prepa en los primeros órdenes de gobierno, Mauricio Vila Dosal no lo hizo de este modo y solo Sayda Rodríguez Gómez, titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable, es la única egresada de la Marista que es titular de una dependencia grande.
Sin embargo, en el gabinete ampliado ya comenzamos a ver nombres como el de María Isabel Rodríguez Heredia, directora del Isstey y que es licenciada en Administración de Empresas de la Universidad Marista, María Cristina Castillo Espinosa del Instituto para la Inclusión de Personas con Discapacidad, que es abogada de la misma casa educativa y a Mauricio Tappan Silveira, quien será ni más ni menos que el encargado de la Consejería Jurídica, que igual es abogado egresado de esta casa.
Además tenemos el caso de Carlos Sainz, quien durante mucho tiempo fue coordinador deportivo de la universidad fundada por los Hermanos Maristas.
Es muy posible que en la lista de jefes de departamento y anexas, veamos a más elementos de esta generación y en este caso tampoco tendría nada de malo, ya que son gente que el gobernador conoce bien y en los que tiene confianza.
Solo resta analizar el desempeño de estos funcionarios, y que sigan demostrando capacidad, ya que muchos de ellos repiten del Ayuntamiento de Mérida.
Ojalá el Gobierno del Estado no le quede grande a la Generación Marista…