La inteligencia de Estados Unidos determinó que Rusia ha usado misiles balísticos norcoreanos en algunos de sus últimos ataques contra Ucrania y que, además, está negociando con Irán la compra de misiles balísticos de corto alcance. John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca, ofreció ayer en una rueda de prensa detalles de esa información de la inteligencia estadounidense, que apunta a que Corea del Norte ha proporcionado a Rusia lanzadores de misiles balísticos y esos mismos misiles. Según Kirby, Rusia disparó al menos uno de esos misiles balísticos hacia Ucrania el 30 de diciembre de 2023 y también lanzó “múltiples” misiles balísticos norcoreanos el 2 de enero de este año como parte de otro ataque contra las infraestructuras de Ucrania.
Esos misiles formaron parte de los bombardeos con misiles y drones que Rusia perpetró contra Ucrania en los últimos días de 2023 y principios de este año, en lo que ha sido el mayor ataque desde el inicio de la guerra, en febrero de 2022.
El portavoz consideró que el lanzamiento de dichos misiles, con un alcance de aproximadamente 900 kilómetros, representa una escalada “significativa” y “preocupante” en el respaldo que, según Washington, Corea del Norte brinda a Rusia en su guerra en Ucrania.
A cambio de estos misiles, Pionyang busca asistencia militar de Rusia, incluyendo aeronaves, vehículos blindados y otro tipo de tecnología avanzada, detalló Kirby.