Aunque ya se ha hablado mucho de este tema, aún sigue siendo curioso lo que pasó durante este año en Yucatán, al menos en el tema electoral.
Un gobierno que en materia económica dejó números más que aceptables en el estado, no pudo lograr que el candidato de su partido pueda darle continuidad en el trabajo estatal. Pero ¿por qué volvemos a recordar este punto?
Justo porque en la nota principal de hoy, nuestro compañero Jesús Gómez nos informa que el Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE), lanzado por el Inegi, pone a Yucatán como la segunda mejor economía del país solo por debajo de Baja California Sur.
Las explicaciones a este fenómeno ya han sido mencionadas hasta el cansancio, como son la llegada de las industrias y las inversiones en el sector inmobiliario que se sienten atraídas por la seguridad de Yucatán y su barata mano de obra.
Por lo tanto, Mauricio Vila Dosal tiene como reto más importante el lograr que esta bonanza económica que exhiben los índices económicos se reflejen en los bolsillos de los ciudadanos con mejores sueldos, ya que estamos seguros que el trabajo existe, ahora el siguiente paso es que este sea mejor pagado, para lo cual la capacitación y la competencia son fundamentales.
En materia económica el gobernador tiene la ruta trazada, por lo tanto, lo único que debe hacer es no extraviar la brújula, y recordar que la palabra mágica en su administración debe ser el incremento salarial y las inversiones en el interior del estado; cualquier cosa además de eso, ya será ganancia.
