¿Qué más debe hacer el sector empresarial de Yucatán para que la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ofrezcan una solución auténtica a la lamentable situación que se ha generado?
La crisis, advierten los empresarios, no da para más y el hecho de que se anuncie que será difícil adelantar aguinaldos para el Buen Fin, tal y como advierte la información de nuestro compañero Jorge Euán Suaste, es una señal más de preocupación.
Ciertamente, José Manuel López Campos, presidente de la Concanaco-Servytur, aseguró que las autoridades federales dispusieron de 12 a un 17% de reducción en la tarifa aplicable para los meses de noviembre y diciembre, sin embargo, este “apoyo” -nuevamente concuerdan todos- será insuficiente ante las deudas que las organizaciones han tenido que contraer para mantenerse en funciones.
De concretarse lo anunciado por los empresarios en lo que refiere a aguinaldos, se dará un golpe duro en Yucatán a un programa de estímulo para las ventas que sigue ganando aceptación y preferencias.
Lo anterior sólo refuerza la noción de que medidas civiles y pacíficas, aunque más drásticas como movilizaciones, protestas multitudinarias y hasta apagones, comienzan a verse como las opciones que el Gobierno Federal quiere sentir para cumplir con su palabra.
Al final, no se olvide, la gran promesa de la reforma energética fue optimizar este gran recurso para beneficiar a todos los mexicanos con precios justos y mejores servicios.
Todo eso en referencia a la electricidad… ¿Hablamos ahora de la gasolina?
Ya se dio marcha atrás a un aeropuerto. Valdría la pena analizar si otras reformas que lastiman quincena a quincena el bolsillo de los mexicanos también podrían cancelarse…
