El tema central del encuentro será la sostenibilidad, lo importante de la unión en el gremio
La República Dominicana acogerá del 13 al 16 de noviembre el XVI Congreso Latinoamericano de Apicultura, según han anunciado la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD) y la Federación Internacional Latinoamericana de Apicultura (Filapi).
La actividad, que por primera vez se realiza en la República Dominicana, será celebrada en el recinto de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (Uasd) y constituye “el marco ideal” para festejar los cinco siglos de la introducción de la abeja “apis mellifera” (también conocida como abeja malífera o europea) a Las Américas.
El tema central del encuentro será la sostenibilidad en la apicultura latinoamericana, destacando la importancia de la colaboración entre organizaciones apícolas y otros actores relevantes para promover prácticas más responsables y rentables en este importante sector, de acuerdo con un comunicado de los organizadores.
Entre los temas figuran biología y salud de las abejas, apicultura para el desarrollo, así como economía, tecnología y calidad apícola, entre otros.
Durante el congreso, el evento “más relevante” en el ámbito apícola de Latinoamérica, se realizarán conferencias magistrales, paneles de discusión, rondas de negocios, presentación de trabajos científicos, cata y degustación de mieles, así como una exposición apícola donde los participantes podrán acceder a tecnologías e insumos innovadores. También será posible establecer contactos con colegas y empresas del sector, agregó la nota.
La producción de miel en la República Dominicana fue de 629,817 kilogramos, según la Oficina Nacional de Estadística (ONE). Se estima que en la actualidad hay 100,000 colmenas y unos 4,000 apicultores.
Estados Unidos, Puerto Rico y otras islas del Caribe, como Martinica y Curazao, forman parte del principal mercado de exportación, aunque la misma, desde hace años, se ha visto afectada por el cambio climático.
Muertes por el cambio climático
En otra noticia, el cambio climático pondrá una inmensa presión sobre los sistemas sanitarios, pudiendo causar hasta 14.5 millones de muertes para 2050, según el informe “Quantifying the Impact of Climate Change on Human Health”, elaborado por la consultoría estratégica Oliver Wyman en colaboración con el Foro Económico Mundial.
El estudio profundiza en las devastadoras consecuencias para la salud pública que ocasiona el aumento gradual de las temperaturas medias de la Tierra a través del análisis de seis categorías de fenómenos climáticos: inundaciones, sequías, olas de calor, tormentas tropicales, incendios forestales y subida del nivel del mar.
La investigación deriva que las inundaciones representan el mayor riesgo de mortalidad por clima, y se estima que causarán 8,5 millones de muertes en 2050; seguidas por las sequías, indirectamente relacionadas con el calor extremo, con una previsión de 3.2 millones de muertes; y las olas de calor, con una estimación de aproximadamente 1.6 millones de muertes de cara a 2050, detalló Oliver Wyman en un comunicado.
El informe muestra también estrategias de reducción de emisiones para evitar pérdidas económicas de hasta 12.5 billones de dólares para 2050, un coste económico muy elevado para la sanidad mundial. De ahí que los expertos plantean acciones centradas en minimizar los impactos del calentamiento global:
Reducción de riesgos para la salud: disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero puede reducir la incidencia de enfermedades respiratorias y cardiovasculares causadas por la contaminación del aire.
Ahorros en costes de atención médica: los países deben promover sistemas de atención e infraestructuras flexibles para construir resiliencia ante los aumentos previstos de morbilidad y mortalidad relacionados con el clima. En el caso de tener menos enfermedades y una población más saludable, se puede llegar a reducir los costes de atención médica, aliviando así la presión en los sistemas de salud.
Protección de ecosistemas: las sequías afectan profundamente a las naciones más pobres que a las más ricas. Por ello, se necesitan proyecciones urgentes de medidas proactivas para mitigar los impactos de la sequía y generar resiliencia en estas regiones vulnerables.
El estudio prevé que para 2050 aproximadamente el 70% de las muertes se concentren en regiones identificadas de alto riesgo, en particular en el Sudeste Asiático, donde las olas de calor prolongadas llegarán a causar un aumento de enfermedades.
Texto y fotos: EFE / Agencias