Un poco más delgado y vestido con uniforme de preso color beige, el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, se quejó de que la negociación con la FGR para alcanzar un acuerdo reparatorio en el caso Odebrecht lleva más de un año suspendida, “por alguna razón”.
Sentado en el banquillo de los acusados, el exfuncionario enumeró una serie de acciones de “colaboración” con la FGR para acceder a un criterio de oportunidad que le permita extinguir la acusación por lavado de dinero que pesa en su contra. Manifestó su ofrecimiento para reparar el daño.
Lozoya Austin recordó al fiscal Alejandro Gertz Manero, que pidió que lo extraditaran a México y que después de ello denunció ante la FGR a un grupo de legisladores y funcionarios que supuestamente recibieron sobornos a cambio de aprobar la reforma energética.
Enlistó a los políticos que ha señalado como beneficiarios: “Un exsenador (Jorge Luis Lavalle), un director de Pemex (Carlos Treviño Morales,) y un exdiputado federal (Ricardo Anaya) que probablemente no regresará a México”.
Lozoya Austin señaló que Pemex y la UIF establecieron un monto de reparación para alcanzar un acuerdo reparatorio en el caso Odebrecht.
Texto y foto: Agencias