Maestros se encuentras preocupados por el tema de las pensiones y jubilaciones, así como las prestaciones médicas
El anuncio que hizo el gobernador Mauricio Vila Dosal respecto a la necesidad de inyectar cada año una mayor cantidad de recursos al Isstey para evitar su colapso financiero, generó mucha preocupación entre los docentes yucatecos, ya que al momento hay un gran número de maestros que están a la espera de jubilarse dignamente y están en completa incertidumbre.
“Como se sabe, hay una situación crítica con el Isstey, pero yo creo que con una buena negociación y un buen diálogo con las autoridades, pero sobre todo, con una buena estrategia, se puede salvar a la institución, pero que tampoco se dañen los derechos de los trabajadores, sino por el contrario, que sea para ayudarlos a que estén bien”, dijo el Profr. Alejandro Chulim Cimé, aspirante a dirigir los destinos de la Sección 57 del SNTE.
Como ayer publicamos, el Ejecutivo comentó que otra opción viable para no heredar el problema a la siguiente administración es plantear la reforma a la Ley del Isstey, lo que implicaría un posible aumento en los años para alcanzar la jubilación que en la actualidad es de 30 años de servicio.
“Se trata de un tema delicado que preocupa no solo por el tema de las pensiones y jubilaciones, sino porque hay otros temas de seguridad en los que dependemos del Isstey, como las prestaciones médicas, pues nosotros no pertenecemos al Seguro Social, sino que de nuestras aportaciones que le hacemos se contrata el servicio del seguro social, entonces queremos que nos garanticen y que nos den un servicio de calidad”, recalcó.
Así es que, el hecho de que el Isstey no tenga finanzas sanas, se reflejó en los montos de los préstamos a los que los docentes tienen derecho para créditos hipotecarios, que son hasta de 400 mil pesos, una cantidad con la que no alcanza por si misma para adquirir una casa en Mérida.
“Es una realidad que al maestro estatal no le alcanza para comprar una vivienda digna, y que pocos son los que tienen algún dinero ahorrado para completar”, dijo Chulim Cimé, quien recordó que en la Sección 57 hay una gran cantidad de trabajadores que son personal de apoyo o asistencia a la educación, quienes llevan 10 años o más laborando por medio de contratos que tienen que renovar cada año, y que además, por esta situación no tienen prestaciones, ni seguridad laboral.
Texto y foto: Manuel Pool
