Maribel Guardia honra la memoria de su hijo, Julián Figueroa, con un altar para Día de Muertos

A casi siete meses del fallecimiento de Julián Figueroa, Maribel Guardia, su madre, prepara un altar de muertos con algunas de las pertenencias de su hijo.

Será la primera vez que entre en la habitación de Julián desde su muerte, un paso que reconoce como difícil pero necesario.

A pesar del dolor, Maribel cree que Julián está en un lugar mejor y considera sus lágrimas como un acto de egoísmo.

Estas fechas son importantes para la familia, ya que eran momentos significativos para Julián y su padre, Joan Sebastian.

Maribel tiene esperanza de reencontrarse con su hijo en el más allá y quiere honrar su vida y ser feliz, como él hubiera deseado.

Ella busca ser un ejemplo de fortaleza para aquellos que atraviesan un duelo similar y cree en las señales que su hijo le envía, como la aparición de un fuerte olor a rosas en momentos especiales.

Fuente: Cortesía