Medicina Maya: La albahaca de monte como una solución a las flatulencias y a la dispepsia


En la Península de Yucatán, la civilización maya ha logrado conservar por siglos el conocimiento generado a partir de su interpretación ambiental, en particular el uso de las plantas medicinales, es decir por su medicina herbolaria.

Una de estas plantas es Ocimum campechianum, la albahaca de monte o “x’ kakaltuum”, en lengua maya, esta planta crece de manera silvestre en climas cálidos y húmedos, por la condición de ser hierba silvestre pasa desapercibida, ya que carece de un atractivo visual, como es el caso de la mayoría de las hierbas.

Dejando a un lado su aspecto estético, esta especie tiene un potencial medicinal excepcional y por lo cual te informaremos en esta nota, donde se abordarán aspectos biológicos y sus diferentes usos en la medicina tradicional.

 

 

La inflamación intestinal es la alteración más común para la cual se emplea esta planta, pero existen otros trastornos de tipo gastrointestinal para los cuales también se usa, en estas están las úlceras, la gastritis, la fiebre intestinal, la disentería, el empacho, para vómitos, inflamación y dolor de estómago.

 Así como para vermífugo, es decir, contra lombrices y antiemético, como un medicamento que previene o reduce las náuseas y los vómitos. Para el tratamiento de estas enfermedades, las hojas de la albahaca de monte son la parte de la planta más utilizada.

El “x’ kakaltuum”, por su nombre en maya, es un excelente apoyo del estómago y se usa con éxito para aliviar la dispepsia, el cual es un trastorno de la digestión que aparece después de las comidas y cuyos síntomas más frecuentes son náuseas, pesadez y dolor de estómago, ardor y flatulencia.

Ante lo mencionado, se ha comprobado que ayuda a reducir los gases y a prevenir flatulencias, además, tradicionalmente, se emplea con frecuencia para favorecer la expulsión de las lombrices intestinales.

Vale la pena recalcar que una de las funciones más importante es que desinflama el colón. El x’ kakaltuum es muy bueno para el dolor de estómago, desinflama el colon y evita la formación de divertículos, pero también es útil para problemas del sistema respiratorio, resfriados, gripe y fiebre.