Melissa se convierte en huracán y azota el Caribe

Emiten alertas de desalojo y despliegan equipos de emergencia para mitigar los daños del fenómeno meteorológico

El fenómeno meteorológico “Melissa” que azota el Caribe se convirtió en huracán y se prevé que continúe fortaleciéndose durante las próximas horas, anunció ayer el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.

“‘Melissa’ se ha convertido en huracán con vientos sostenidos que alcanzan los 120 km/h”, informó el NHC en la red social X, y advirtió que la tormenta puede intensificarse rápidamente y transformarse en un huracán mayor hoy. 

La tormenta ya ha causado la muerte de tres personas en Haití, según las autoridades locales, y se dirige ahora hacia Jamaica, para luego volver al norte y enfilar hacia Cuba.

El CNH prevé fuertes vientos y lluvias torrenciales que podrían generar inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra en Jamaica, Haití y República Dominicana. 

Los residentes del suroeste de Haití deben iniciar de inmediato los preparativos necesarios para proteger sus vidas y propiedades, advirtió el CNH.

Agregó que la tormenta podría causar daños significativos a la infraestructura y potencialmente aislar a las comunidades durante un período prolongado.

El primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, instó el viernes a los residentes de las zonas propensas a inundaciones a prestar atención a las advertencias y prepararse para una evacuación.

Las lluvias de “Melissa” ya han inundado varias carreteras en la capital jamaiquina, Kingston, según imágenes difundidas por los medios locales.

“Melissa” es la decimotercera tormenta tropical de la temporada en el Atlántico, que se extiende desde principios de junio hasta finales de noviembre.

El último gran huracán que azotó Jamaica fue “Beryl”, a principios de julio de 2024, que causó la muerte de al menos cuatro personas. 

Los gobiernos del Caribe han emitido alertas de desalojo y han desplegado equipos de emergencia, en coordinación con la Cruz Roja y organismos internacionales, para minimizar el impacto humano y económico del fenómeno.

Texto y foto: Agencias