Mentiras derribadas con verdades o sobre la valentía de hacer lo correcto

Deyanira Trinidad Álvarez Villajuana
Whatsapp para sesiones:
9991-20-66-69
grupodesarrollarte@gmail.com
Twitter / Instagram:
@deya_bendecida  

El día de hoy, publiqué en mi Facebook Psicóloga Deya Álvarez Villajuana, que me siento muy feliz y agradecida con Dios, porque reafirmo lo que en múltiples ocasiones he constatado, tanto en mi propia vida como en la de muchas otras personas, las mentiras, siempre se caen. 

“Deyanira tiene esto y lo otro” decían los ignorantes, resentidos y/o pagados, pues resulta que ni esto ni lo otro, y lo digo con una sonrisa en la boca, y no porque sea de mi especial interés la opinión ajena, pues en realidad no la considero relevante, sino porque debido a mi estructura psicológica, en realidad me divierte demostrar el porqué estaban totalmente equivocados y además, me sirve como una capacitación, volviéndome cada día más experta en las áreas en donde justo me quisieron “derribar”. Así que, en realidad, han trabajado para mi todo este tiempo. Dios, los usó para mi bien. 

Continuando con la experiencia de vida, les compartía que el día de ayer me dieron los resultados de mi evaluación psicológica a nivel pericial, que yo misma solicité, para echar por tierra todos los supuestos “diagnósticos”, que han ido de manera irrisoria y con mala fe, desde “enfermita, discapacitada”, hasta “sociópata, narcisista”. Y como sabía que eran mentiras ambas, con todo gusto, confianza y seguridad, me sometí al proceso de evaluación psicológica nivel pericial, por parte de expertos en Psicología Forense de la Fiscalía General del estado de Yucatán. 

Mis resultados, no me sorprendieron, pues gracias a Dios, sé muy bien quién soy y mi autoestima es tan sana, que nunca me dejé influenciar por la mala fe e ignorancia ajena. Los resultados en síntesis expresan que soy una mujer con autoestima saludable, ningún indicio de psicopatología o desequilibrio mental o emocional, resiliente, muy inteligente, emprendedora, enfocada en lo bueno, apasionada por los logros y muy empática, ayudando a los demás. Con algunos síntomas de estrés postraumático por la violencia que recibí de parte de ex parejas, debidamente denunciados, ambos, y ya validado lo que expreso incluyendo testimonios de testigos múltiples, pero lo he superado, gracias a Dios, por la estructura psicológica que me dio, reitero. 

Es importante señalar, que no cuento con el “típico perfil de víctima”, y que todos los ataques y violencia digital, difamaciones, calumnias y demás actos sistemáticos, ellos sí provenientes de una mente enferma y sociopática, dieron inicio desde el 2012, cuando decidí terminar una relación de noviazgo, justo después de ello, y tras haber sido amenazada de forma directa con la frase “o conmigo o con nadie”, por parte de un sujeto multidenunciado que riéndose de la sociedad, las leyes y las mujeres, se está lanzando como “candidato a diputado por Morena” en este 2024, en Kanasín, Yucatán. 

Así están las cosas… Impunidad, falta de protección, revictimización, pero, Dios me dio voz y muchísimas redes familiares, así como un amplio apoyo social, además de pruebas contundentes de que él siempre mintió sobre mí y de paso mi otro ex, con el que “casualmente” mi ex multidenunciado se empezó a llevar. Gente de la misma bajeza, espiritual, intelectual y emocional, concordaron, no me sorprende. A ambos los ayudé, pues el primero no tenía ni siquiera la preparatoria concluida y el segundo, conmigo consiguió su título de contador y el trabajo que hoy tiene. 

Pero eso sí, narcisistas ambos, según ellos “galanes”, pero la verdad es que antes de ellos, tuve mejores pretendientes, y guapos en verdad, reconociendo en sus valores y lealtad, la mayor de sus bellezas. Bastante feitos los dos, por fuera y por dentro, solo les hice caso, pues ambos me rogaron y literalmente los dos lloraban a mares cuando yo decidía terminar la relación. Por compasión, cedía, y ahí está el resultado. Por ende, y para fines prácticos, decidí tener mascotas de compañía, viendo en los animales, un amor más genuino, noble y auténtico, pues, dicho sea de paso, ambos mintieron, fueron infieles y se aprovecharon de mis recursos y ayuda, mordiendo la mano de quién les ayudó y siempre fue más que ellos, y no por los títulos, inteligencia o amistades, sino por mis valores como persona, los cuales continué teniendo de forma íntegra, hasta la fecha. 

Les quería compartir esta vivencia, porque mis resultados son algo valioso, que utilizaré para los fines que así considere, y con la pena, les debo sus “diagnósticos falsos”, gente envidiosa y frustrada, y recuerden: si de niños tuvimos alguna “complicación”, lo cual jamás he negado, y mi doctor desde niña, Manuel Ruiz Mendoza, me dice de manera textual que todo se resume, en una palabra: Genio, eso no significa que no la podamos superar y que sea una “etiqueta” de por vida. 

Falso. Quien se perdió de mis valiosos consejos, compañía y tiempo de vida, fueron los desleales, y dejaré lo mejor de mí, para quien en verdad se lo merezca. Te invito a hacer lo mismo. Bendiciones.