Decenas de miles de personas desfilaron el jueves por las calles de Varsovia y denunciaron que el país está “en guerra” por la situación en la frontera con Bielorrusia, en tensión por la presión de cientos de inmigrantes que intentan cruzar a territorio de la Unión Europea (UE).
Más de cien mil manifestantes, según los organizadores, recorrieron las calles de la capital desde el mediodía para conmemorar el Día de la Independencia, en una jornada marcada por la situación en la frontera del este del país.
El viceministro de exteriores polaco, Stanisław Żaryn, alertó a última hora del jueves de que ha vuelto a aumentar el número de migrantes concentrados en la frontera y afirmó que “el escenario que se maneja es que volverán los asaltos masivos” en la zona.
En la concentración previa a la marcha que cruzó el centro de Varsovia los organizadores aludieron constantemente a la situación en la frontera y afirmaron que “Polonia está en guerra” y que “atacan por el este desde Moscú, desde el oeste desde Alemania, desde la Unión Europea y desde todo el mundo”.
“Damos las gracias a nuestros soldados en la frontera, por su peligroso trabajo y por proteger a nuestra patria”, exclamó uno de los portavoces de los organizadores de la marcha, que en los años anteriores fue escenario de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y miembros de movimientos de ultraderecha.
La Guardia de Fronteras polaca difundió en la tarde tres videos en los que se puede ver a niños acampados frente a la alambrada fronteriza en la zona de Kuznica, donde recientemente se produjeron intentos masivos de traspasar la barrera.
Los videos se acompañaban de la frase: “más instrucciones a los niños bielorrusos, más material para la propaganda, los niños despiertan más emociones”, como denuncia de la presunta manipulación de menores para utilizarlos con intereses políticos por parte del régimen de Minsk.
Texto y foto: Efe