En el interior del estado buen número de motos no tiene placas de circulación, ni cuenta con seguro de vida y no en pocas ocasiones viajan más de tres personas en el vehículo, sobre todo menores de edad
Debido a que en los municipios se vive prácticamente una total anarquía con los motociclistas, el integrante del Observatorio de Movilidad Sostenible de Mérida (Omsm), Eduardo Monsreal Toraya, consideró que lo que se requiere es que estas personas cuenten con un servicio de transporte más eficiente, incluso como del tipo de la Ruta Va y Ven, en el Anillo Periférico de Mérida, además de utilizar más la bicicleta, ya que la moto puede convertirse en un vehículo muy peligroso si no se utiliza con responsabilidad.
-Lo que sucede es que las diferencias entre una moto y una bicicleta es que la primera alcanza una mayor velocidad y, en caso de choque, el conductor sale proyectado y lo primero que suele aporrear es la cabeza, mientras que, con la bicicleta, aunque es más ligera, el golpe puede ser un poco menor, además de que cada vez aumentan las ciclovías -comentó.
En entrevista con Peninsular Punto Medio dijo que la siniestralidad con los motociclistas se debe a múltiples factores, ya que, por ejemplo, el casco que suelen utilizar no es el certificado o, peor aún, no lo usan, además de que adolescentes y hasta niños manejan estos vehículos, incluso de manera temeraria, sin estar conscientes de la gran responsabilidad que esto conlleva, a lo que suma el hecho de que ahora las motos se pueden adquirir hasta en los supermercados como una mercancía cualquiera.
Igualmente se destaca el hecho de que en los municipios buen número de motos no tiene placas, ni cuenta con el seguro de vida correspondiente y no en pocas ocasiones viajan más de tres personas en el vehículo, sobre todo menores de edad. A todo lo anterior se le suma la gran falta de educación vial por parte de los conductores.
“En muchos municipios que de antes eran bicicleteros, ahora se convirtieron en motocicleteros. Los policías municipales están rebasados para imponer multas, se cometen bastantes infracciones y entonces optan por aflojar y no ser tan exigentes con las reglas, ya que muy pocos las cumplen, pese a que esto es un riesgo para todos”, explicó.
Indicó que hay municipios que han tenido un notorio crecimiento de la mancha urbana como Kanasín y Valladolid, y no pocos, para poder desplazarse, han optado por ya no utilizar la bicicleta, y adquieren una moto.
“Además, influye que, en ocasiones, no existen suficientes unidades de transporte urbano. Otro problema es que suelen desplazarse entre las comisarías y eso lo hace aún más peligroso”, agregó.
Monsreal Toraya explicó que lo anterior propicia que estas unidades ligeras tengan que estar transitando junto con automóviles, camiones, volquetes y tráileres que suelen tener los llamados “puntos ciegos”.
“Las motocicletas son muy inestables, no cuentan con dispositivos electrónicos estabilizadores, pueden derrapar muy fácilmente por aceite tirado, anticongelante, por esquivar un bache o cuando se les atraviesa un animal”, destacó.
El Omsm, con base en datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), señaló que la Zona Metropolitana de Mérida incrementó cuatro veces su parque vehicular entre el 2000 y el 2020, aunque la población aumentó tan sólo 1.5 veces.
En 2020, tan solo el segmento de automóviles fue el que se elevó 356 por ciento, pasando de 131 mil 859 coches en el 2000 a 470 mil 34 en 2020; las motocicletas también aumentaron exponencialmente, pasando de 16 mil 472 a 155 mil 370, es decir, crecieron poco más de 940 por ciento.
Hasta el mes anterior, el experto vial René Flores Ayora reportaba 77 víctimas fatales de accidentes de tránsito en el estado, de los cuales 47 eran motociclistas.
Este especialista siempre aclara que su contabilidad es conservadora, ya que la realiza a través de los medios de comunicación, por lo que puede darse el caso de alguno que suceda y pueda no publicarse.
Por su parte, Monsreal Toraya manifestó que deben realizarse campañas de sensibilización, que se cuenten con más ciclovías para que se animen a utilizar mejor la bicicleta e incluso hasta que se les apoye para adquirir cascos más económicos o que se les pueda financiar y que ellos lo paguen poco a poco, aunque para ello se requiere de presupuesto.
Hace unos años en Mérida se efectuó una campaña donde se vendían los cascos a mitad de precio, ya que para ese entonces no se utilizaban.
Señaló que también debe explicarse a los motociclistas que no vean a este vehículo como la primera opción para trasladarse, sino que sea como la cuarta opción.
-También se deben realizar operativos, a fin de presionar para que cuenten con licencias porque suele darse el caso que algunos motociclistas no las tienen o están vencidas desde hace años -apuntó.
Indicó que en este renglón difiere del apoyo que suele darse para que las personas puedan adquirir licencias de motocicletas, ya que sería mejor invertir en infraestructura vial.
BARATAS Y FÁCILES DE ESTACIONAR
Una motocicleta puede costar desde 18 mil pesos, dependiendo de la marca y en caso de que sea de medio uso, en 6 mil pesos e incluso menos.
Una de las ventajas que tienen es que son fáciles de estacionar, sin embargo, un aspecto en contra es que hasta para la adquisición de una póliza piden más requisitos, por lo que en México únicamente sólo el 1.3% están aseguradas.
Monsreal Toraya lamentó que exista la posibilidad que se dé servicio de taxi por motocicleta, como sucede en otros países.
“Con tal de satisfacer la demanda del transporte suele recurrirse a estas opciones, pero lo que debe tomarse en cuenta es la seguridad. Hace años, una cadena de pizzería comenzó regalando pizzas si el repartidor llegaba luego del tiempo convenido, pero esto propició accidentes y se tuvo que suspender”, resaltó.
Asimismo, recordó que hace unas semanas entró el vigor la Ley de Movilidad, con la que se busca una armonización en todo el país para que se reduzcan los accidentes viales. “Sería importante realizar discusiones para discutir las modificaciones”, anotó.
Con esta ley se fijaron los límites de velocidad, la aplicación de operativos de alcoholímetro en todo el país y aplicar pruebas para las licencias, ya que en algunos estados no se realizaban.
Texto: Darwin Ail Baeza
Fotos: Agencias
