Mujer pierde la vida, tras estrellarse en un expendio de cerveza

OXKUTZCAB.– El pasado sábado ocurrió un siniestro vial que provocó la muerte de una persona, así lo dieron a conocer autoridades de este municipio, quienes informaron que en el cruce de la calle 44 con 55, una mujer que circulaba en su motocicleta de sur a norte sobre la calle 44 fue impactada por otra motocicleta en el que viajaban tres personas, choque en el que la mujer que viajaba con preferencia, murió por el siniestro.

Las autoridades locales señalaron que la mujer perdió la vida después de impactarse contra un expendio de cervezas, tras haber salido volando por el entronconazo que provocó la otra unidad de dos ruedas.

El lugar fue acordonado por elementos de la Policía Municipal de Oxkutzcab y también se menciona que la motocicleta que originó el accidente y que circulaba de poniente a oriente sobre la calle 55 y no hizo su alto.

De acuerdo con el esposo de la fallecida, los tres sujetos que iban a bordo de la motocicleta circulaban a exceso de velocidad, ya que él también iba a bordo de una motocicleta, pero segundo antes logró pasar dicho cruce, pero instantes después escuchó el choque de la motocicleta de su esposo con la ora unidad.

Al escuchar el impacto, el esposo regreso a ver a su esposa la cual yacía cerca de la entrada del expendio de cervezas, ubicado en contra esquina de conocido hotel. Sin embargo, solo vio una escena triste y trágica, debido a que su mujer ya no tenía signos vitales.

Al parecer, la fallecida correspondía al nombre de Karina. Los tres sujetos que viajaban en la moto que al parecer ocasionaron  el accidente, uno de ellos se dice que está grave los otros dos fueron llevados también al hospital debido a las lesiones que presentaron, pero estarán en calidad de detenidos una vez que se les otorgue la alta médica y respondan por los daños y la muerte ocasionada.

Hasta pasada las 2 de la madrugada  de ayer domingo, aún no había llegado la Semefo para levantar el cuerpo para realizar la necropsia de ley.

Texto y foto: Bernardino Paz