Nepal controla la capital, luego de disturbios que dejaron 30 muertos

El Ejército de Nepal retomó el control de la capital, Katmandú, después de dos días de disturbios, los más violentos en 20 años, que llevaron al primer ministro a dimitir y a la apertura de un diálogo sobre el futuro del país.

El lunes la policía nepalí reprimió violentamente una ola de protestas en contra la corrupción y una reciente decisión del gobierno de bloquear las redes sociales. Los enfrentamientos dejaron 30 muertos y al menos mil heridos, de acuerdo con el ministerio de Salud nepalí.

A pesar del restablecimiento de plataformas como Facebook, X o YouTube, la promesa de una investigación sobre la violencia policial y la renuncia del primer ministro, KP Sharma Oli, grupos de jóvenes manifestantes, bajo el paraguas de “Generación Z”, saquearon el martes edificios públicos y las viviendas de varios dirigentes.

El Parlamento fue incendiado, así como la residencia del hasta entonces primer ministro.

En la capital, los militares vigilaban que se respetara el toque de queda impuesto hasta nueva orden para reimponer la calma. Las escuelas, empresas y comercios permanecían cerrados.

El presidente Ramchandra Paudel también pidió a “todos, incluidos los manifestantes, cooperar para resolver pacíficamente la difícil situación del país”.

Texto y foto: Agencias