René Emir Buenfil Viera
psicrenebuenfil@gmail.com
¿Cómo te puedes dar cuenta si el profesional de la salud que te atiende es Educador (a) en Diabetes? Primero que nada, por el lenguaje, quienes tenemos conocimiento de educación en diabetes sabemos la importancia del uso de las palabras adecuadas ya que la evidencia científica nos dice que tienen un efecto directo en la motivación.
Las conductas y los resultados, es por eso que evitamos decir que las personas son “diabéticas”, más bien son personas con diabetes, personas primero y luego con diabetes, al decir “diabéticas” es como si lo más importante que les define es la diabetes, cuando no es así, una persona con diabetes es muchos más que su condición de salud, que ni siquiera tiene que ser lo más importante que puedas saber de esa persona.
De hecho con personas de otras condiciones de salud como el cáncer o el Sida ya decimos que tienen o persona con, así que apliquemos esto a las personas con diabetes también.
Además, evitamos decir que “sufren” o “padecen” diabetes, más bien viven con diabetes, así le quitamos la carga negativa y entendemos que a veces la glucosa en sangre está arriba del rango, otras veces abajo, y otras en rango, pero no tienen que sufrirlo ni padecerlo a fuerzas, por lo menos no todo el tiempo.
A su vez es útil que en lugar de decir enfermedad, que nos recuerda al contexto hospitalario, decir que es una condición de vida ya que la mayoría de su manejo está en manos de la persona en su vida cotidiana, y muy poco dentro del contexto clínico que es una ayuda el equipo de profesionales de la salud y la salud mental.
Los componentes fundamentales del cuidado de la diabetes incluyen:
Acceso a la insulina: 100 años después de su descubrimiento, millones de personas con diabetes no pueden acceder a la insulina que necesitan.
Al automonitoreo: La monitorización de la glucosa en sangre es un componente fundamental del cuidado de la diabetes. Muchas personas con diabetes no tienen acceso a los dispositivos y suministros que necesitan.
A la medicación oral: Muchas personas con diabetes necesitan medicamentos orales para controlar su condición. En muchos países de ingresos bajos o medios, estos medicamentos no están disponibles o no son asequibles.
Acceso a una dieta saludable y actividad física: Las personas con diabetes o con riesgo de desarrollarla necesitan acceso a una alimentación saludable y a un lugar donde hacer ejercicio. Ambos son componentes fundamentales del cuidado y la prevención de la diabetes.
Acceso a la educación y apoyo psicológico: Las personas que viven con diabetes necesitan educación continua para controlar su condición. Muchos no tienen acceso a educación sobre diabetes.
En México según el atlas mundial de la diabetes son 14 millones de personas que viven con diagnóstico de diabetes, y se estima que por cada una de ellas, hay dos personas que tienen diabetes pero no lo saben.