Fue previo al Consejo General del INE cuando el consejero Jorge Montaño, presidente de la Comisión del proceso electoral del Poder Judicial, informó que no se realizarán los ya conocidos conteos rápidos para la elección judicial, sino que se anunciarán una vez que se contabilice la totalidad de los votos.
Este enfoque, diferente al utilizado en elecciones anteriores, responde a la naturaleza del proceso y busca garantizar la precisión y transparencia en el anuncio de los ganadores, aunque esto implique una espera más prolongada después de la jornada electoral. Montaño subrayó que los resultados no estarán disponibles el mismo día de la votación.
A diferencia de los procedimientos habituales, en esta elección los votos no se contarán directamente en las casillas. En su lugar, se agruparán según el cargo al que correspondan y serán enviados a las juntas distritales, donde se llevará a cabo su escrutinio.
Este método centralizado tiene como objetivo fortalecer la organización del proceso y evitar discrepancias en el manejo de los sufragios. Sin embargo, también incrementa el tiempo necesario para dar a conocer los resultados finales, lo que podría generar incertidumbre temporal entre los electores.
Para garantizar la confianza en el proceso, Montaño señaló que se trabaja intensamente en la publicidad y transparencia del conteo de votos. El objetivo es que cada etapa del escrutinio sea clara y verificable para la ciudadanía, fortaleciendo así la legitimidad de los resultados.
En relación con la instalación de casillas, Montaño mencionó que la elección contará con aproximadamente 80 mil puntos de votación, lo que representa menos de la mitad de las 170 mil casillas habilitadas durante la elección federal de 2024.
Texto y foto: Agencias
