Armando Escalante
Periodista y analista político
Otra vez una mayoría de medios de comunicación ignoró una de las noticias más fuertes que se hayan registrado en el país. Se hicieron a los desentendidos porque aunque se dicen críticos —y fingen serlo— en el fondo están alineados con el poder presidencial y no solo le temen al ejercicio de la libertad de prensa, sino a perder sus contratos de publicidad con la 4T.
Y en este silencio participaron no solo los medios llamados “nacionales” sino que todos los demás que conforman el “círculo rojo” como los numerosos editorialistas, opinadores, analistas, y demás tiradores de tinta, que no fueron capaces de aludir al reportaje que la plataforma Latinus difundió en torno a los contratos que tienen los amigos de los hijos de Manuel López, en especial en varias obras de infraestructura diseminadas en el país.
El reportaje evidencia que amigos de Andrés López Beltrán, hijo de AMLO, son “los nuevos ricos de la 4T” que obtuvieron contratos millonarios para un parque ecológico en los terrenos del antiguo aeropuerto de Texcoco, otorgados por la Comisión Nacional del Agua y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano.
El reportaje, con autoría de Montserrat Peralta, Julio Astorga, Isabella González y Mario Gutiérrez Vega, destapó que, para obtener contratos en el Parque Ecológico Lago de Texcoco, varias empresas habrían proporcionado diferentes direcciones para aparentar una falta de conexión. Sin embargo, en años anteriores, estas mismas empresas se referenciaban a un domicilio idéntico en la Avenida Kiki Murillo No. 102 en el Desarrollo Urbano La Primavera, Culiacán, Sinaloa. Esta red de empresas habría obtenido no sólo contratos de la Conagua, sino también al menos cinco proyectos de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), encabezada por Román Meyer Falcón.
El titular de la Sedatu ha involucrado a allegados de Andrés López Beltrán en la construcción del nuevo Archivo General Agrario ubicado en la avenida Juárez en el Centro de la Ciudad de México. El proyecto ha otorgado en 2022 un contrato de 56 millones de pesos a la empresa Organismo Promotor Logístico para la realización del proyecto ejecutivo del archivo agrario.
En la investigación que se titula “Los negocios de los amigos de Andy en el Gobierno federal”, se calcula que los amigos del hijo del presidente, identificados como Alejandro, Santiago y Diego, han ganado más de 100 millones de pesos del erario con la red de tráfico de influencias.
Interrogado al respeto, tal y como era de esperarse, el inquilino de Palacio Nacional admitió que si había tales contratos y enseguida acuñó su famosa intersección ¿y? minimizando los hechos: “vean el reportaje… no es nada… mis hijos no son corruptos” —esgrimió en su estéril defensa el tabasqueño, en forma sarcástica y burlona como suele portarse, al desdeñar como siempre los reportajes sobre los desvíos de su gobierno.
Sirva esta breve síntesis para reiterar el contenido del reportaje que, como apuntamos arriba, no todos se atreven a difundir. Ni siquiera los opositores se atreven a subirlo a sus propias redes.
El xix.— Según relata un informe privado de la situación política del Sureste, de por si ya muy contaminada con la inercia lopezobradorista (como pasó en Campeche y Quintana Roo) “hay priístas en Yucatán que son tan malos, tan nefastos, que aún en estos tiempos tan difíciles y tan graves serán capaces de causarle daño de nuevo al estado, no bastándoles el que en su momento causaron cuando fueron gobierno. Según ese análisis, a diferencia de otros estados donde irán en alianza con el PAN, en nuestra entidad se aprestan a apoyar al presidente y a sus candidatos para colocarse en el gobierno y de paso cuidarse las espaldas, pero sobretodo, para no tener que apoyar al candidato opositor que los borraría del mapa”. El problema es que vivimos tiempos de indefiniciones y los favoritos no terminan de cuajar sus proyectos como tampoco definen a sus equipos, de tal manera que se rodean de “colados” que desde adentro planean dinamitar a su real enemigo.