La democracia electoral se basa en la necesidad y efectividad de las elecciones, pero no se queda ahí, sino que tiene que ver también con la efectividad y el funcionamiento de los gobiernos, resalta experto
En cualquier país las elecciones son creíbles en la medida que son organizadas por autoridades electorales independientes, que garanticen que se va a respetar la voluntad popular, afirmó Eduardo Núñez Vargas, director del Instituto Nacional Demócrata en Guatemala y El Salvador.
Al ofrecer la conferencia magistral “Democracia Electoral: América Latina en Perspectiva”, en días pasados en Mérida, Núñez Vargas subrayó que la participación ciudadana activa, tanto en la elección de los gobernantes como en la forma y en el fondo de la toma de decisiones políticas, resulta fundamental para buenos gobiernos.
Explicó que la democracia electoral se basa en la necesidad y efectividad de las elecciones, pero no se queda ahí, sino que tiene que ver también con la efectividad y el funcionamiento de los gobiernos. Este concepto en América Latina adquiere mucha relevancia en los últimos 40 años, cuando el edificio de la democracia se cimienta en la idea de que hubiera condiciones para la alternancia en el poder.
“La única manera de garantizar las condiciones para la alternancia en el poder es organizar elecciones creíbles y, las elecciones son creíbles en la medida que son organizadas por autoridades electorales independientes”, recalcó.
Asistieron al foro el consejero presidente del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (Iepac), Moisés Bates Aguilar; la magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Estado de Yucatán, Lissette Cetz Canché; Iulisca Zircey Bautista Arreola, directora de Estudios y Proyectos Internacionales del INE y Víctor Manuel Abraham Chapur, presidente de la Comisión de Jóvenes de Coparmex Mérida.
TENDENCIAS
En su larga conferencia magistral, El Dr. Eduardo Núñez identificó nueve tendencias en la democracia en América Latina, y la más importante, en todos los países, incluso los que tienen una clara tendencia al autoritarismo, es que se mantiene la regularidad electoral para definir a sus autoridades, aunque con un aumento de la inconformidad.
El especialista destacó que, en todos los países, al final, se dirimen los cambios de gobierno a través del voto y estos se respetan, tal como lo vimos en Bolivia cuando se derrocó a Evo Morales y en Guatemala en los años 80.
Otra tendencia es la heterogeneidad política y alternancia en el poder, es decir, existe una creciente diversidad en cuanto a partidos que ganan elecciones y llegan al poder, generando olas de una u otra orientación ideológica. Basta recordar, dijo, que hay olas de triunfos de partidos conservadores y otra de partidos liberales.
“El último ejemplo de ellos es Milei, en Argentina, que es abiertamente conservador y la gente votó por su discurso de acabar con la mafia del poder de los políticos del pasado. Prometió una renovación y la gente votó por el cambio”, manifestó.
En su exposición detalló los retos, alcances y fortalezas y debilidades de los procesos electorales que se han presentado en los últimos años en Latinoamérica.
Aseguró que la tarea para los partidos es tratar de avanzar con base en los reclamos y anhelos de la sociedad y generar resultados socioeconómicos que permitan superar los problemas que viven los ciudadanos.
OTRAS VOCES
La observación electoral es trascendente y fundamental para que las autoridades electorales se esfuercen más por hacer un mejor trabajo a fin de garantizar elecciones transparentes y a la vista de todos, aseguró el consejero presidente del Iepac, Moisés Bates Aguilar, durante la ceremonia inaugural del Foro Internacional Electoral.
En el evento, que tuvo lugar en el auditorio de la Coparmex, Mérida, organizado por el Instituto Electoral y el Instituto para el Desarrollo Democrático y la Competitividad (Iddeco), Bates Aguilar reconoció que para el Iepac es importante ir de la mano de la sociedad civil y la observación electoral, porque una autoridad observada se aplica al cien por ciento para no dejar lugar a dudas.
Aclaró que la observación electoral no solamente son críticas, sino que debe verse también como un área de oportunidad porque la experiencia que se obtiene de otras elecciones, de otros países y estados, pueden nutrir y facilitar una mejor organización electoral para el Estado de Yucatán.
El consejero presidente estuvo acompañado por la presidenta regional para América y Europa del Iddeco, Claudia Isela Guzmán González, quien en su oportunidad explicó que con el foro inicia un proceso de observación electoral que tendrá como principio fundamental, el generar ejes de acompañamiento y visión del desarrollo democrático de Yucatán.
Ante representantes de instituciones gubernamentales, autoridades electorales, empresarios y de la sociedad civil, afirmó que la observación electoral es mucho más que solamente identificar la eficiencia del sistema electoral el día de la jornada, porque si bien ha sido fundamental para mejorar el diseño institucional, hoy se requiere generar recomendaciones para hacer que nuestro sistema democrático genere condiciones donde los factores de desarrollo sean permanentes.
FACTORES QUE INCIDEN
Por su parte, la presidenta del Tribunal Electoral del Estado (TEE), Lissette Guadalupe Cetz Canché, destacó la importancia de la observación electoral, al ser uno de los factores que inciden directamente en el éxito de los procesos electorales y por ello reconoció que, como servidores públicos responsables en este proceso electoral, su actuar debe ser pulcro, imparcial, profesional y comprometido con la democracia.
“El hecho de que la ciudadanía esté pendiente de cada una de las etapas electorales no debe ser vista como una intimidación, al contrario, para nosotras y nosotros es un aliento para que sigamos con nuestro trabajo serio y eficaz que genere certeza en los resultados electorales”, afirmó.
El encargado de dar la bienvenida fue el presidente de la Coparmex Mérida, Emilio Blanco del Villar, quien aprovechó la ocasión para refrendar el compromiso de sus agremiados de seguir colaborando por y para la democracia.
Consideró que el actual proceso electoral es la oportunidad que tiene la sociedad para mostrarse como una nación que vive en democracia, aunque advirtió que, desde su punto de vista, la única receta para la democracia es “votar, votar y votar”.