Varias legisladoras de Yucatán ocupan un lugar privilegiado en la vida pública, pero eso no es obra del milagro, sino del trabajo diario y más como mujeres, pero también porque supieron defender su derecho de paridad ante los tribunales.
Hoy, por tratarse del Día Internacional de la Mujer, Punto Medio preguntó a varias diputadas si alguna vez sufrieron de discriminación.
Aquí sus propias palabras:
Karla Franco Blanco (PRI):
“Afortunadamente no he tenido alguna experiencia abiertamente discriminatoria, más que de manera general las que hemos pasado como mujeres.
En mi caso he tenido la oportunidad de haber estado en espacios de la administración pública desde hace 20 años, he ocupado puestos de mandos medios y dirección.
En la participación política como secretaria de la CNOP (soy la primera mujer), pero sí es preciso mencionar que después de tantos años es mi primer puesto de elección popular”.
Paulina Viana Gómez (PAN):
“Más allá de una felicitación o solamente aceptar el pleno reconocimiento a décadas de luchas que comenzaron a consolidarse tras el voto femenino, lo que las mujeres solicitamos es caminar libremente sin recibir comentarios incómodos, hacer ejercicio al aire libre sin tener miedo a ser perseguidas, o bien en el área laboral tener equidad salarial y un ambiente libre de acoso.
Como joven mujer que incursiona en el ámbito político puedo comentar una experiencia que viví en campaña, cuando al encontrarme frente a frente con un candidato opositor recibí comentarios de menosprecio por mi edad y género”.
Janice Escobedo Salazar (PRI):
“Tuve una muy mala experiencia en un centro laboral: recibí muy malos tratos, me hicieron sentir menos, que no hacía nada bien. Esto afectó mi autoestima, estaba deprimida, ir a trabajar me causaba un verdadero pesar, era temerosa e insegura.
¿Por qué lo soporté? Primero por miedo. Temía que si yo decía algo creyeran que lo inventaba, si nada pasaba nadie me contrataría después por haber hablado. Pero soy afortunada. Tengo una familia que me quiere y que me ha apoyado en todo momento, unos papás que me dieron la fuerza para confiar en mí y alejarme de ese centro de trabajo que tanto daño me hacía.
En el Congreso del Estado estamos trabajando por eliminar todo tipo de violencia contra la mujer, pero es necesario dar el paso más importante: que la mujer hable, acuse y que éste tipo de actos y quiénes los realizan, no queden impunes”.
Kathia Bolio Pinelo (PAN):
“He sufrido violencia política en las dos últimas elecciones, primero para llegar a la diputación federal y ahora como diputada local, en el último caso porque mi partido me negó la candidatura para el Senado de la República o una diputación local por mayoría.
En el primer caso, en el 2015, y luego de ganar una elección interna y quedar en primer lugar como mujer en la 3ra Circunscripción, luego de aceptar ser candidata en el Primer Distrito Federal en donde nadie quería competir, me impugnaron mi cuarto lugar de la lista pluri. Fue una lucha fuerte en el partido y casi renuncio a la campaña.
En el 2018 nuevamente me impugnan por que el Iepac me dio una diputación local, pese a estar en el quinto lugar de la lista. Un dirigente del partido me impugnó porque no podía concebir que las mujeres tenemos espacios ganados por Ley, pero me fui a los tribunales, es una verdadera angustia tener una constancia y no saber si se hará efectiva, fue hasta las 23:55 de la noche del 31 de agosto que pude respirar tranquila”.
Texto: Esteban Cruz Obando
Fotos: Agencias
