La diputada federal del PRI, Lucelly Alpizar Carrillo, advirtió de cambios en el Código Penal, por lo que a partir del 2017 la pesca furtiva de escama y otras especies marinas será considerada como delincuencia organizada, con penas más graves que buscan inhibir esa actividad que deja grandes ganancias a intermediarios, pero no a los hombres del mar.
Al hacer un balance de su gestión como legisladora federal, dijo que desde la Comisión de Pesca de la Cámara de Diputados se ha puesto atención en dar seguridad a los pecadores, en elevar la presencia de la vigilancia en los mares y dotar de más recursos al Inapesca, la institución que realiza estudios de las pesquerías y determina la vedas de las diferentes especies.
“Es que si seguimos permitiendo que las especies sean depredadas nos vamos a acabar el recurso natural del que dependen miles de yucatecos en la costa”, afirmó.
La legisladora recalcó que no se trata de persecución de los pescadores, sino de aquellas personas que comercian con las especies en veda y que se vuelven inmensamente ricos, mientras los que arriesgan la vida para extraerlos de mar no tienen acceso a esos recursos económicos.
Dijo que el tema pendiente en México, pero especialmente en Yucatán, es la reglamentación de la captura del pepino de mar.
“Hay otros temas, como por ejemplo la veda del mero que parece que es insuficiente, en donde hay que realizar estudios para determinar si las fechas son correctas o se tiene que correr, pero para determinarlo, se hacen estudios a través de Inapesca, que es donde hemos puesto recursos por alrededor de mil millones de pesos, 700 más que lo que se venía invirtiendo”, recalcó.
Por lo pronto, parte de ese dinero se empleará en los trabajos para determinar si la pesca en la Sonda de Campeche es viable, ya que por mucho tiempo estuvo cerrada por la explotación petrolera.
–Esteban Cruz Obando