Pobladores de la comisaría de Sitilpech, Izamal y la agrupación Kanan Derechos Humanos, realizaron una protesta afuera del Juzgado Primero de Distrito, ya que se debe realizar una audiencia para modificar la suspensión definitiva de una granja ubicada en Sitilpech, Izamal.
En entrevista, el activista Roberto Sánchez Campos, de la citada agrupación, señaló que hoy deben realizar el fallo, aunque puede pedir un mes más de tiempo, “lo que si nos sorprendió es que Conagua levantó la suspensión de los permisos para que los granjeros utilicen los pozos”.
Hace unos meses, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) suspendió dos pozos y se les dio tiempo para que retiren a los cerdos, ya que morirían, pero todo indica que ya se les autorizó a que vuelvan a utilizar el líquido, por lo que es probable que la granja vuelva a funcionar.
Sánchez Campos indicó que ven una incongruencia, ya que dan señales que continúe y nosotros seguiremos hasta las últimas consecuencias.
Señaló que los pobladores indicaron que en estos meses que la granja ha estado cerrada las enfermedades han reducido notoriamente. “Cuando extraen el agua de los pozos suelen tener residuos de materia fecal de cerdos, así como bacterias”, indicó.
Cuestionado sobre que la materia fecal si contamina, pero que no sería tan grave que más deberían protestar por los pesticidas, que algunos son cancerígenos, explicó que el problema en el estado es el tipo de suelo que es muy permeable y todo termina en el manto freático.Las grandes granjas aseguran que cuentan con lagunas de tratamientos de aguas residuales, por lo que convierten el 85 por ciento de sus lodos en metano y fertilizante. Incluso señalan que reutilizan el agua para regar, realizan cultivos y hasta apicultura.
Los ambientalistas también han minimizado el número de empleos, ya que expertos lo consideran como una excelente opción porque la porcicultura es idónea en los municipios, lo que permite que la gente se quede a trabajar y, en cambio, cuando la industria se queda en Mérida propicia que ellos tengan que estar viajando propiciando problemas de tráfico y hasta de mudanza. De acuerdo, a los empresarios, la porcicultura genera 36 mil empleos en el estado. La granja ubicada en la comisaría de Izamal cría al año 48 mil cerdos.
El activista indicó que al menos en la granja trabajan pocos pobladores.
La comisaría tiene 1,200 pobladores, donde de acuerdo al padrón de campesinos, 560 se dedican al cultivo de las parcelas.
En una protesta anterior, los agricultores señalaron que desde que llegó la granja ya casi no tiene cosecha y tiene que recurrir más a la siembra de zacate para criar borregos. Sembraba calabaza, maíz, ibes, sandía, pepino. Por temporada cosechaba 400 sandías, ahora salen deformes y solo como unas 20.
Explicaron que las hojas de los ibes quedan mulix y da poco y el elote de antes crecía 3 metros, ahora apenas alcanza el 1.80 metros, “es para nuestro consumo y vendía un poco, pero hubo épocas que llegué a ganar como 6 mil pesos mensuales, ahora no sale”. Dijo que debido a la gran cantidad de cerdos que crían, se genera mucha contaminación y llega al aire y de allí a los cultivos.
