Mary Carmen Rosado Mota
@mary_rosmot
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Finalmente, después de tres años de espera esta semana iniciará una nueva edición de los Juegos Olímpicos en la ciudad de luz, una entrega que estará llena de elementos simbólicos donde el deporte será el gran protagonista por cerca de tres semanas de competencias, atletas de todo el mundo se reunirán para celebrar el amateurismo, ese donde el deporte profesional no tiene cabida, y hay mucho que decir al respecto.
Por primera vez en la historia de esta justa deportiva, México acudirá con una delegación compuesta en su mayoría por mujeres, un hecho sin precedentes para nuestro país. 109 atletas integran la delegación tricolor, 63 mujeres y 46 hombres que dejarán todo de sí en cada competencia. No nos equivoquemos, los y las atletas mexicanas no “van a pasear”, tampoco van a “hacer el ridículo” como han manifestado algunas personas en redes sociales. Cada deportista presente en París 2024 se ha ganado su lugar, ya sea por clasificatorios internacionales, nacionales, marcas olímpicas o rankings mundiales.
Claro que quisiéramos una ola de medallas para nuestra delegación, sin embargo, también hay que analizar de manera objetiva y crítica cuáles son las posibilidades que tiene México para obtener metales en esta edición. Este ciclo olímpico, el más corto que se ha tenido, estuvo plagado de polémicas, demandas, enfrentamiento de declaraciones hasta amparos jurídicos porque quienes integran la delegación mexicana no solo se dedican a entrenar, en algunos casos, también deben de hacer gala de las relaciones públicas para conseguir patrocinios y vínculos que les permitan solventar los gastos que implica el deporte de alto rendimiento.
Comandada por la clavadista Alejandra Orozco y el pentatleta Emiliano Hernández, la delegación mexicana llega con mucha ilusión de dejar su propia marca en la historia del deporte nacional. ¿Qué nos queda? Seguirles la pista, apoyar sus competencias, tendremos la oportunidad de vivir la justa olímpica por televisión abierta, por dispositivos móviles a través de internet. Opciones hay muchas, lo único que necesitamos es tener ese interés para alentarles en todo el trayecto.
Por cierto, México no será el único país que va con mayor número de mujeres por primera vez, también será el caso de delegaciones como la de España y Brasil, en un contundente avance que ha tenido el deporte femenil en diversas partes del mundo. No debemos olvidar que la primera vez que las mujeres estuvieron presentes en unos Juegos Olímpicos fue precisamente en París, en 1900, en aquella ocasión apenas fueron el 2% de los participantes, cuando los Juegos regresaron a esta ciudad, en 1924, fueron el 4.30% de la participación total. Cien años después serán el 50% y eso es gracias a cada una que rompió las barreras, que brincó obstáculos y cimentó para todas las que vendrían después la gloria olímpica.
