Yoisi Moguel
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En los últimos años los productos yucatecos han ganado mercado en diversos lugares, tanto en tiendas de conveniencia como en plataformas digitales que se dedican al comercio electrónico en México y el mundo.
Estas oportunidades de negocios han llegado de la alianza entre el sector empresarial y los gobiernos estatal y federal, quienes ven en la suma de esfuerzos la posibilidad de que las micros, pequeñas y medianas empresas alcancen el desarrollo para ser parte importante del crecimiento económico de Yucatán.
Como nunca antes, empresarios y gobierno coincidieron en el punto de alinear fuerzas y llevar a las empresas yucatecas a nuevos mercados, aprovechando la tecnología y la llegada de firmas nacionales e internacionales que buscan la calidad y estándares de los productos de esta tierras.
Así, podemos ver dos ejemplos del nuevo esquema de comercialización en Yucatán, primero el programa Hecho en Yucatán, donde la Canacintra busca posicionar a las firmas yucatecas con un distintivo y llegar a mercados nacionales y del mundo a través de la plataforma Mercado Libre, que en México tiene millones de compradores y que desde hace meses pueden encontrar y comprar productos hechos en tierras yucatecas.
El segundo ejemplo de la nueva forma de hacer comercio es el programa federal de Desarrollo de Proveedores Pyme, que a nivel local impulsa la Secretaría de Fomento Económico y del Trabajo, mediante el cual firmas locales comercializan sus productos en cadenas de tiendas de autoservicios como Soriana, que recientemente abrió sus puertas a más de 60 empresas locales para que puedan exhibir y vender sus artículos y productos en las diversas tiendas que tiene en el estado.
Este programa permitirá a las empresas locales posicionar sus marcas y productos en el mercado yucateco, regional y nacional, pues no podemos olvidar que Soriana es una cadena de supermercados con presencia en todo el territorio nacional, lo que abre la oportunidad a las firmas yucatecas de llegar a compradores de diversas partes de México.
Con esta acción, las marcas locales reciben un impulso de las cadenas de autoservicio, promoviendo sus productos en nuevos mercados apoyados por su calidad y estándares que los ponen al nivel de cualquiera del país y el mundo.