La organización de la cumbre de cambio climático (COP29) que se realizará en noviembre en Bakú, la capital de Azerbaiyán, ha propuesto la creación del Fondo de Acción para la Financiación del Clima (Cfaf), con 1,000 millones de dólares y un paquete de iniciativas.
Azerbaiyán será uno de los contribuyentes fundadores de un fondo que se prevé alcance los mil millones de dólares, y que entrará en funcionamiento cuando concluya la ronda inicial de recaudación de fondos, y cuando diez países contribuyentes se comprometan como accionistas.
El Cfaf se capitalizará con contribuciones de países productores de combustibles fósiles y empresas de petróleo, gas y carbón, según ha anunciado este viernes la organización.
Según un comunicado de la COP29, los miembros se comprometerán a hacer transferencias anuales como suma fija o en función del volumen de producción.
El Cfaf es una iniciativa dentro de un paquete de 14 medidas anunciadas hoy en Azerbaiyán como parte de la agenda de acción de la Conferencia de las partes de la Convención de Cambio Climático de Naciones Unidas en Bakú para aumentar la ambición y permitir la acción climática.
El Cfaf pretende ser un fondo catalizador de asociación público-privada, reduciendo el riesgo de las inversiones. El fondo también incluirá mecanismos especiales y subvenciones para hacer frente rápidamente a las consecuencias de las catástrofes naturales en los países en desarrollo que lo necesiten.
Además, el fondo proporcionará garantías de acuerdos de compra a los pequeños y medianos productores de energías renovables y capital a primer riesgo para proyectos verdes industriales.
El fondo también se centrará en el sector agroalimentario como prioridad para proteger los medios de subsistencia y alcanzar la sostenibilidad neta.
Según la COP29, los beneficios generados por los proyectos se reinvertirán en el fondo, que destinará el 50 por ciento del capital a proyectos climáticos en países en desarrollo que cuenten con apoyo en materia de mitigación, adaptación, investigación y desarrollo.
Entre los requisitos, estos proyectos fomentarán la adopción de tecnologías energéticas limpias, mejorarán la eficiencia energética, reforzarán la resiliencia climática de las poblaciones vulnerables, así como el desarrollo de tecnologías de vanguardia.
El otro 50% de las aportaciones se destinará a ayudar a los países miembros a cumplir la próxima generación de Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) para mantener el objetivo de 1.5 grados de temperatura.
Para ello, Azerbaiyán se ha comprometido a predicar con el ejemplo y trabaja para presentar una NDC alineada con el objetivo de 1.5 grados. Además, según la nota, la Presidencia de la COP29 anima a todas las partes a que presenten planes similares.
Un 20 por ciento de los ingresos generados por las inversiones se depositará en un Fondo de Financiación de Respuesta Rápida (2R2F) que proporcionará ayudas en condiciones muy favorables y en forma de subvenciones, con el objetivo de acceder a financiación inmediata para hacer frente a las consecuencias de las catástrofes naturales en los pequeños Estados insulares, en desarrollo y otros países vulnerables.
El fondo tendrá su sede y secretaría en Bakú (Azerbaiyán), y formarán parte del mismo representantes de los contribuyentes y un comité de auditoría independiente. Según la organización, se está creando un grupo de trabajo con expertos financieros internacionales para seguir desarrollando el modelo de gestión y el mecanismo de financiación.
Babayev ha pedido que los donantes “se unan a la proposición del fondo para que se pueda “cumplir el plan de la COP29 para aumentar la ambición y permitir la acción”.
Texto y foto: EFE / Agencias