La falta de competitividad no es el único factor que influye en los llamados “gasolinazos”, también lo es el excesivo gasto corriente que genera el gobierno federal durante el ejercicio fiscal, por lo que su reducción es la clave para acabar con estos golpes a la economía, aseguró el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Juan Manuel Ponce Díaz.
—No podemos perder de vista que gran parte del costo de la gasolina se deriva de un Impuesto Especial sobre Producción y Servicio, es decir, cada vez que compramos un litro de gasolina el 40% del precio es para el impuesto, el cual no es algo que tenga que ver con la oferta y la demanda abierta, pero sí con el gasto corriente federal —explicó.
El presidente de la Canacintra coincidió que el precio de la gasolina ha subido de manera importante a raíz de la liberación de su precio, tal y como sucedió con el Gas LP, producto de tener un sólo proveedor como Pemex, —entonces, ¿qué tan competitivas pueden ser las gasolineras, la distribuidora de Gas LP, si al fin y al cabo todos dependen del mismo proveedor? —cuestionó.
La clave es, dijo, invertir en refinerías y todo aquello que tiene que ver con darle valor agregado a los energéticos, por eso se depende tanto de importaciones. También se tiene que trabajar para que haya infraestructura que permita a la iniciativa privada ser proveedor de energéticos.
Expuso que en México hay un problema de oferta y demanda; la demanda sigue creciendo y demás, pero es el precio es poco elástico, y a pesar de eso, la gente compra gasolina porque no existe otra forma para transportarse.
—En el momento que la iniciativa privada, los empresarios, logren consolidar proyectos de poder importar gasolina, tener almacenamiento y transporte, vamos a tener mayor cantidad de proveedores y eso permitirá que podamos importar gasolina de manera abierta y tener un mejor precio —subrayó.
Pronosticó que lo anterior no se ve lejano, sería a corto plazo; “tengo la expectativa que en los próximos seis meses podemos ver un ajuste para abajo y podremos ver la diferencia”.
Sin embargo, reiteró no perder de vista que el precio de la gasolina está basada en un impuesto que sirve para solventar gastos del gobierno federal, y es quien se debe administrar mejor.
Ponce Diaz adelantó que el próximo gobierno federal tendrá como prioridad qué hacer para reducir en el país el costo energético.
Jesús Gómez
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