Puro Veneno, los Trascendidos de Peninsular Punto Medio

GANAN TERRENO.- Cientos de personas participaron en la Marcha del Orgullo este fin de semana. A pocos políticos se les vio por allá, pero alguien que no pasó desapercibido fue el diputado federal Rommel Pacheco, quien acompañó a su esposa, la influencer Lylo Fa abordo de un vehículo como parte de esta marcha. Lylo fue de las más aclamadas por los asistentes, tanto que dejó en segunda plano al exclavadista olímpico, pues ella se llevó las miradas y las “selfies” de quienes la reconocieron.

VER PARA CREER.- Trascendió que el Ayuntamiento de Acanceh, que encabeza Mario Cruz Herrera, invirtió 170 mil pesos para ponerle luz a una casa en el monte. Amplió la red de electricidad de baja tensión, pero el beneficio fue únicamente para una casa particular, ubicada en la carretera a Petectunich, que inclusive está en proceso de construcción. Los vecinos dicen que esta obra no trajo beneficio para ellos, ya que siguen viviendo a oscuras.

 CANDIDATEA A SU HIJA.- María Esther Alonzo, exalcaldesa de Progreso y diputada federal del PRI, busca regresar a la política porteña, pero esta vez a través de su hija la “Chelita” Magadán. Entre los círculos políticos se comenta que la exfuncionaria está moviendo las piezas para que su hija Esther Magadán sea la nueva candidata a la alcaldía, incluso se dice que no será por su partido tricolor, sino que buscará conectarla con los guindas y jugar con Morena. 

¿INESPERADA RENUNCIA?.- Hace unos días el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, señaló que la renuncia de Marcelo Ebrard a la Secretaría de Relaciones Exteriores para aspirar a abanderar a Morena en la candidatura presidencial, propiciaría una cascada de renuncias y todo apunta que a eso se debió la sorpresiva renuncia del exdirector del Instituto Nacional de Antropología e Historia en Yucatán, José Arturo Chab, que fue reemplazado por Anna Goycolea Artis. Todo hace suponer  que Chab será colaborador de una de las “corcholatas” morenistas, probablemente Ebrard, aunque en política no hay nada escrito en piedra.