René Emir Buenfil Viera
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Cuando te das cuenta que tu pareja tiene rasgos narcisistas, te puedes decidir a dar pasos para atrás en tu relación y poner más distancia entre ustedes porque tomas consciencia de las intenciones detrás de sus palabras y acciones: control, manipulación y chantaje.
Cuando abres los ojos y empiezas a ver las secuelas del abuso narcisista en tu vida, en tu estado de ánimo, en tu sistema nervioso desregulado, en tu seguridad y autoconfianza, en tu capacidad de alzar la voz y decir lo que necesitas, lo que opinas y lo que piensas sin temor a represalias, en el cansancio y desgaste que implica vivir con una persona que no acepta nunca sus errores, y que por tanto le tiene que echar la culpa a las demás personas, sobre todo a ti, es entonces cuando comienzas a planear a futuro, en pensar hacia dónde moverte para salir de este ciclo en el que una persona quiere tener el control sobre ti como si fueras una ficha de ajedrez, y va a hacer lo que sea necesario para salirse con la suya.
Entender el abuso narcisista te da mucha claridad mental porque comprendes que hay cosas que no van a cambiar como su egoísmo y falta de empatía, que nunca va a ser suficiente como para ganarte su aprobación e incluso su cariño, específicamente su amor incondicional que está fuera de tu alcance, entonces dejas de querer seguir perdiendo el tiempo preocupándote de cosas inútiles porque no van a producir el resultado que deseas, por más que lo intentes, y te pares de cabeza y te incomodes para que esa persona esté cómoda, y aunque te pongas de tapete para que te pise, nunca es suficiente, y que por eso te pone a prueba constantemente, para comprobar si sigue teniendo el poder y el control sobre ti porque esa persona dice salta, y tú preguntas qué tan alto.
Querer desprenderse de la persona narcisista generalmente no sucede de la noche a la mañana, aunque muchas personas que logran cortar la relación en numerosas ocasiones lo terminan haciendo en un impulso rápido de atrevimiento, y sin dar muchas señales, incluso sin que la pareja se entere hasta que ya pasó, para que no les vea y les quiera convencer para seguir bajo su embrujo y lavado de cerebro.
Si tienes que ir dando pasos pequeños, poniendo un límite tras otro con el tiempo y lentamente, adelante, cada quien puede decidir el camino y las formas con las que se empieza a quitar las ataduras y cuánto tiempo se tarda en dar el golpe final y definitivo, se vale cometer errores, y tener miedo de las represalias, que seguro aparecerán y te querrá hacer difícil y complicado cada paso, por eso es útil venir a terapia para fortalecerte emocionalmente y te hayas desenganchado negativamente de sus modos, sus maneras, y su expertez para darte donde más te duele y que todo lo que digas sea usado en tu contra.
Cuando te alejas lo más importante es respirar con alivio de que ya se acabó, procesar y digerir la situación de tal manera que no vuelvas a caer en las garras de ninguna persona narcisista otra vez y trabajar en dejar de ser tan complaciente.