Inauguran en la Ciudad de México una muestra que pretende sensibilizar y demostrar el potencial de la sociedad civil organizada, a través de recorrido cronológico y emotivo
Los terremotos más letales siempre han despertado una respuesta solidaria de la sociedad civil mexicana, que se ha encargado de suplir las urgencias que el Estado no atendía, como demuestra una exposición presentada el viernes en la Ciudad de México.
Con el título “Sismos 1985/2017, de los escombros a la esperanza”, el Museo Memoria y Tolerancia repasa los momentos más trágicos pero a su vez más esperanzadores de México, vividos en los potentes terremotos de septiembre de 1985 y septiembre de 2017.
Mediante herramientas gráficas, audiovisuales y textos de testimonios, la exhibición ofrece un recorrido cronológico y emotivo a través de seis salas que muestran la manera en que los terremotos transformaron la sociedad mexicana, despertando un sentimiento de solidaridad y urgencia entre los ciudadanos.
Lo que la exposición pretende es “sensibilizar y demostrar el potencial de la sociedad civil organizada”, que cada vez “instrumentaliza más transformaciones significativas”, dijo a Efe Linda Atach, directora de la muestra.
“En 1985, la sociedad civil fue una masa de individuos que salieron desesperados pero solidarios a cubrir las urgencias que la burocracia no estaba atendiendo”, dijo Atach, parafraseando al escritor mexicano Carlos Mosiváis.
La directora sostiene que lo que el escritor dijo hace más de 30 años “sigue siendo vigente”, como pudo verse tras los potentes terremotos de septiembre del pasado año, cuando miles de personas se organizaron en las calles para retirar escombros donde había gente atrapada.
En el recorrido, que estará abierto al público hasta el próximo octubre, también es posible trasladarse a los momentos posteriores a esos sismos sumergiéndose en una sala que reproduce el ruido y los gritos de los rescates.
También se exponen portadas de periódicos que reflejan cómo medios de comunicación de todo el mundo retrataron esas fatídicas jornadas.
Como dato curioso, se observa que en el terremoto de 1985 todavía imperaba una fuerte censura en México, por lo que, mientras la prensa extranjera daba la cifra de 20,000 muertos, los medios nacionales no ofrecían datos.
En total, 244 fotografías enriquecen la exposición, gracias a la aportación voluntaria de 42 fotógrafos, en una muestra promovida por Oxfam.
Texto: El Universal
Foto: Efe