A 20 años de su muerte, que se cumplirán el próximo 7 de diciembre, la escritura de José Donoso no sólo sigue intacta: “Donoso parece seguir escribiendo y publicando”. Al menos esa es una de las conclusiones de la periodista e investigadora literaria Cecilia García-Huidobro, quien presentó, junto con el novelista Alejandro Zambra el libro Diarios tempranos. Donoso in progress, 1950-1965, bajo el sello de la UDP (Universidad Diego Portales) en su colección Vidas Ajenas.
En el marco de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, la editora de los diarios íntimos del escritor y el autor de Formas de volver a casa, ambos chilenos, celebraron la obra y legado de quien es considerado uno de los pilares literarios de América Latina.
A la muerte de un escritor, dijo García-Huidobro, “se cierra un ciclo creativo y su obra puede verse en perspectiva con el fin de hacer un balance. Pero el caso de Donoso es atípico, porque él se encontraba en plena revisión de su novela póstuma cuando estaba ya agonizando”.
Luego, en 2009, señaló la especialista, aparece Correr el tupido velo, el diario de Donoso bajo el cuidado editorial de su hija adoptiva, Pilar Donoso (1967-2011). Se trata de “un libro desgarrador que representó una invitación a cambiar la visión que el mundo hispano tenía de él, sobre todo por los aspectos inéditos y, sobre todo, dolorosos”.
Así que la “vida” de Donoso se había alargado de alguna manera. Al respecto, Zambra comentó que a partir de entonces había un nuevo Donoso y que quedaron al descubierto “tantos Donosos como lectores de Donoso”.
– Excélsior