Repite Jaguares la historia del San Luis

Cambiaron de nombre, de sede, pero la historia no parece perdonar y poco a poco alcanza al Chiapas FC.

Los Jaguares están a un partido de perder la categoría pese a su corta estancia en el máximo circuito tras el cúmulo de problemas en tres años.

La historia de este club es reciente cuando Carlos López Chargoy compró la franquicia de San Luis en 2013. Los Jaguares originales, que habían nacido en 2002 con Antonio Leonardo como dueño y presidente, terminaron su historia 11 años después al llevar la franquicia a Querétaro.

En estos seis torneos, el cuadro del sureste cargó con la historia del San Luis, que incluyó un descenso en 2004, una final y un partido de película ante Atlas en 2006, cuando el San Luis vivió un momento único, pues el club quedó penúltimo en el descenso gracias a una temporada de 25 puntos que los clasificó. Fue su mejor torneo porque además llegaron a la final. La salvación llegó tras vencer al Atlas en dos minutos.

“El equipo históricamente no había hecho más de 18 puntos, entonces necesitábamos hacer 25 puntos en promedio y esperar que los equipos con los que competíamos no hicieran excelentes torneos, recordó Raúl Arias, entrenador de aquel San Luis.

“En el último minuto, porque así fue, en el último minuto de juego nos salvamos, fue una salvación histórica porque íbamos perdiendo contra Atlas y les ganamos”. En el Clausura 2013, el último torneo que San Luis estaba en su plaza, tenía un cociente de 1.1529, fue décimoquinto por encima de Puebla, Atlas y Gallos, equipo que fue el descendido.

Ya como Chiapas FC, el cuadro ha finalizado en el lugar 14 del cociente en el 2014, mismo sitio en 2015 y décimo en el 2016. Sin embargo, este año los adeudos con el plantel y cuerpo técnico mermaron la regularidad y ahora son últimos en el cociente con 114 puntos por 115 de Monarcas.

Por si no fuera suficiente, la Comisión Disciplinaria investiga la invasión de cancha de los aficionados durante el encuentro contra Santos en el Estadio Víctor Manuel Reyna, situación que podría costarle un partido de veto.

Al igual que en 2006, necesitan de nuevo una victoria contra Atlas para salvarse, sólo que esta vez será en el Estadio Jalisco, y dependen de una derrota de Monarcas para el milagro.– Medio Tiempo

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