Más de un día después del paso de la tormenta tropical Grace, los yucatecos afectados alzan la voz por el prolongado corte de la luz, que los deja sin agua potable y otros servicios
Un día después del paso de la tormenta tropical “Grace” por territorio yucateco, la queja de los ciudadanos se multiplicó en contra de la Comisión Federal del Electricidad (CFE), ya que tras 24 horas del corte, el servicio eléctrico no había sido conectado.
Los menos afectados solo sufrieron el corte de la luz por minutos u horas, pero para la gran mayoría de los meridanos y de los municipios del sur del estado la espera fue mucho más larga, pese a que la CFE anunció, a eso del medio día de ayer, que ya había reconectado al 93% de los usuarios que había “perdido la luz”.
De hecho, en gira de trabajo por Valladolid, Chichimilá, Tekom, Cuncunul y Kaua, el gobernador Mauricio Vila Dosal corroboró con las autoridades municipales los principales daños ocasionados por dicho de fenómeno y el restablecimiento gradual de las actividades.
En Valladolid, el alcalde Enrique Ayora Sosa mencionó que solo se presentaron afectaciones menores, generalmente por la caída de árboles y ramas, así como cortes parciales de energía eléctrica en cinco comisarías, pero sin pérdidas humanas que lamentar.
El mandatario estatal se trasladó a la localidad de Chichimilá, en donde el alcalde anfitrión, Samuel Uc Poot, señaló que las afectaciones en esta demarcación fueron principalmente por los fuertes vientos que se llevaron láminas de casas y se cayó la antena y rompió el reloj del Palacio Municipal.
FUERTES VIENTOS
De los daños ocasionados por “Grace”, damos cuenta en esta crónica de lo que el equipo de Peninsular Punto Medio observó el jueves pasado.
Sin duda esta tormenta tropical será recordada por muchos años por el hecho de que a pesar que se esperaba trajera una cantidad importante de lluvias, no fue esto lo que la caracterizó, sino sus fuertes vientos, que terminaron ocasionando la caída de árboles y el corte de los servicios de energía eléctrica, y con esto los del suministro de agua potable e internet.
“Grace” ingresó a la Península de Yucatán con categoría de huracán 1 por Tulum, Quintana Roo, esto minutos antes de las seis de la mañana del jueves, pero desde las cuatro de la mañana comenzaron a sentirse fuertes rachas de viento en las comunidades ubicadas justo en el derrotero de este fenómeno que abarcó Valladolid, Cuncunul, Chamkon, Tekom, Chichimilá, Tixcacalcupul, Chikindzonot y hasta Peto.
Los daños fueron significativos en esta zona, que es muy vulnerable por el alto nivel de pobreza que existe, además de que estuvo en la trayectoria directa del huracán “Grace”, el cual registró un diámetro de 180 kilómetros, que luego se degradó a tormenta tropical. Cabe recalcar que las afectaciones no fueron las esperadas en comparación con los ciclones del año pasado, que ocasionaron importantes inundaciones.
Los vientos, que en esta zona registraron velocidades sostenidas de más de 110 kilómetros por hora y rachas superiores, tiraron grandes árboles en las carreteras dejando incomunicadas a varias poblaciones como Xanlah, Muchucuxhcá, Xuxcab y Chan Chichimilá, punto en el que estaba programada la entrada de “Grace” a Yucatán.
CAE ÁRBOL SOBRE CASA
Así es que para llegar a Chikindzonot era necesario llegar a Valladolid y pasar por Tekom y Tixcacalcupul y sus comisarías de Mahas, Poop y Ek Pedz. Fue precisamente en Poop donde se reportó la caída de un enorme árbol de jabín sobre una casa construida a través del ya desparecido programa Fonden.
Uno de los enormes troncos del viejo árbol que fue arrancado de raíz cayó sobre una de las esquinas del cuarto, que se cuarteó, mientras que otro extremo se precipitó sobre una habitación contigua, destruyendo las láminas de este espacio en el que duermen varias personas, quienes se preocupaban por el lugar en el que habitarán.
En medio del agua que se estancó en el terreno de este predio ubicado en la calle 22 entre 19 y 23, Juan Francisco Pat Poot explicó que en la parte posterior se aplastó una casita de paja en la que vivía su abuelita de 95 años.
La mamá de Juan, doña Luciana Kauil Poot, narró a Peninsular Punto Medio los momentos de angustia e incertidumbre que vivió con los integrantes de su familia, que por precaución pasaron la noche en el cuarto de material que les construyó el Fonden y que resultó dañado por la caída del viejo árbol.
“Aquí vivimos tres familias, la casa de mi tío Mariano fue la que se aplastó”, explicó Martín Gabriel Moo Kauil, quien pidió la pronta intervención de las autoridades tanto para proveerles de láminas y material para reconstruir sus viviendas, como para tomar las medidas necesarias para que con los encharcamientos no proliferen los moscos y que luego esto pueda causarles enfermedades.
PIERDEN SEMBRADÍOS
Además, solicitaron urgentemente el envío de despensas, ya que la mayor parte de los habitantes de esta comisaría, lo mismo que en la zona, se dedican a la agricultura, y con el paso de “Grace” perdieron sus sembrados.
“Yo perdí la cosecha de mi parcela, quedó destrozado todo, cada año hacemos milpa, el año pasado también nos afectaron las tormentas”, dijo Juan Bautista Pat Poot.
En el mismo tenor se pronunció don Eladio Pat Poot, quien lamentó la pérdida de sus sembrados de maíz, frijol y calabaza. “En el camino a mi parcela hay muchos árboles tirados”, señaló el entrevistado y agregó que de los huracanes o ciclones que pasan este sí les causó muchas afectaciones porque, aunque no tardó, sus vientos fueron muy fuertes.
En la avenida principal de esta comunidad se cayeron dos enormes árboles que cubrieron uno de los carriles, mientras que en la plaza principal de la población también sucumbieron a los vientos árboles y hasta una antena de internet que se dobló completamente quedando en el piso.
En este lugar la señora María Esther Poot Cocom relató que los fuertes vientos terminaron tirando un árbol sobre su patio. “Se murieron la mitad de mis pollos y gallinas, y por el árbol no he podido llegar al fondo del terreno a ver cómo están mis pavos”, manifestó consternada esta mujer, mientras su pequeño nieto se esmeraba por mostrar los daños que en su casa ocasionó “Grace”.
Texto y fotos: Manuel Pool