La senadora Rosa Adriana Díaz Lizama presentó un Punto de Acuerdo para que el Senado de la República exhorte al gobierno federal a dotar de más recursos económicos y en especie al gobierno del Estado para que combata con la mayor eficiencia y eficacia posibles los brotes de dengue y chikungunya en Yucatán.
La legisladora federal solicitó también que la Secretaría de Salud federal trabaje de manera coordinada con las autoridades estatales para fortalecer y mejorar las acciones y estrategias del operativo sanitario en el Estado para combatir y erradicar al mosquito transmisor.
—El dengue y la fiebre chikungunya son infecciones virales transmitidas a los seres humanos por medio de la picadura de mosquitos infectados del género Aedes Aegypti y/o Aedes albopictus y prospera en zonas urbanas pobres, suburbios y zonas rurales —destacó.
—No hay vacuna o medicamento para evitar la infección por el virus chikungunya y el dengue produce un síndrome pseudogripal grave y en ocasiones puede derivar en un cuadro potencialmente mortal. Las medidas de saneamiento básico y protección personal son las mejores prácticas de prevención —subraya la secretaria de la Mesa Directiva del Senado.
Desde 2004, el virus de chikungunya ha causado brotes masivos y sostenidos en Asia y África, donde más de 2 millones de personas han sido infectadas. En América, se detectó por primera vez en diciembre de 2013. Desde esa fecha y hasta el 30 de mayo de 2014, se han notificado a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) más de 100,000 casos en 18 países.
De acuerdo con la senadora yucateca, el secretario estatal de Salud, Jorge Mendoza Mézquita, ya confirmó que el dengue empezó a repuntar hace un mes y ya se confirmaron casos en 80 municipios del Estado. En el país se tienen registradas 11,099 personas con dengue y 5,315 con chikungunya, distribuidas en 18 estados de la República
La senadora Díaz Lizama destaca que el derecho a la protección de la salud es una garantía fundamental establecida en la Constitución. En consecuencia, aseveró, el combate a ambos males en las diferentes entidades de la República Mexicana tiene una gran relevancia.
—Debemos atender un grave problema de un gran impacto social, ya que se trata de un asunto de salud pública del Estado mexicano. Es necesario enfatizar en la atención y la prevención de este problema de salud, de manera urgente —concluyó.