Rusia y Ucrania intensifican sus ataques por tierra y aire

Los ejércitos ucraniano y ruso aceleran sus contraofensivas en los frentes sur y noreste, donde los combates son cruentos y las bajas en ambos bandos cada vez mayores, mientras continúan los bombardeos rusos y el lanzamiento de drones ucranianos contra Moscú.

La defensa antiaérea frustró un ataque con drones contra el puerto de Sebastopol, en la anexionada península de Crimea, donde se encuentra la mayor base de la Flota rusa del Mar Negro, según informó el Ministerio de Defensa de Rusia.

Además, el alcalde de Moscú anunció el derribo esta madrugada de dos drones que se dirigían a la capital rusa.

Los ataques con drones contra la capital rusa se han sucedido con cierta regularidad en las últimas semanas.

“La guerra está volviendo gradualmente al territorio de Rusia, a sus centros simbólicos y bases militares, y este es un proceso inevitable, natural y absolutamente justo”, advirtió el pasado 30 de julio el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.

En tierra, las tropas rusas mejoraron sus posiciones en la zona de Kupiansk (noreste) y rechazaron una treintena de ataques ucranianos en diversos sectores de la línea del frente, según el último parte del Ministerio de Defensa ruso.

Las autoridades ucranianas anunciaron hoy mismo el comienzo de la evacuación forzosa de la población de 37 localidades de este distrito, situado en la región de Járkov, próximas a la zona de los combates.

Un portavoz de Defensa indicó que durante la pasada jornada, las tropas ucranianas sufrieron hasta 760 bajas, 290 de ellas en el frente de Donetsk (este) y que las fuerzas rusas rechazaron 17 ataques enemigos.   

Además, según Konashénkov, en las últimas horas la defensa antiaérea rusa abatió cinco misiles Himars y Uragán, así como 38 drones.

Texto y foto: Agencias