Aunque parezca contradictorio, porque a simple vista parece atentar contra sus ganancias, es la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) la que se ha puesto como meta elevar el Salario Mínimo General en México a, por lo menos, $194.68 al día para el 2030.
Esto, dice la central patronal, para que los mexicanos que menos ganan lleguen a la línea de bienestar propuesto por el Coneval, que es el organismo que mide la pobreza en México.
De acuerdo con el documento Hacia una Nueva Cultura Salarial, dado a conocer a mediados del año pasado, la Coparmex señaló a las autoridades y a la Comisión Nacional de Salarios Mínimos la ruta a seguir.
Entre sus propuestas, algunas con temporalidad a diciembre del año pasado, la Coparmex pidió llegar a la línea de bienestar para una persona propuesta por el Coneval, es decir, que su sueldo alcance para comprar los productos de la canasta básica, por lo menos.
De ahí, incrementar el Salario Mínimo en forma gradual y responsable a fin de que llegue a cubrir la línea del bienestar para una familia de 3.5 individuos promedio, con el ingreso de 1.7 a 2 personas del núcleo familiar trabajando en la economía formal para el 2030.
En consecuencia, propone una meta de incremento del Salario Mínimo General para el 2030 en el rango de entre $162.35 y $194.68 pesos al día, correspondiendo con un incremento nominal anual de entre los $5.8 a $8.5 pesos reales anuales para los próximos 12 años.
Además, una sola zona económica que ayude a revertir el círculo vicioso de la pobreza, ya que actualmente las micro y pequeñas empresas conforman el 99% de las unidades económicas del país, contribuyen con el 74.18%9 de la fuerza laboral y se estima que aportan 15% de la Producción Bruta Total de las unidades económicas establecidas.
Sin embargo, el 72.5% de la Población Económicamente Activa (PEA) que trabaja en micro y pequeñas empresas lo hace de manera informal.
En este sentido, son empleos que carecen de acceso a seguridad social, prestaciones y cuentan con bajos niveles de productividad y de remuneración.
Todo ello implica altísimos niveles de mortandad empresarial, bajos niveles de productividad en la economía y de aportación al PIB, sobre todo, frente al potencial que representan.
–De esta manera la baja calidad y baja productividad del empleo informal, se vincula al bajo salario y a la baja o nula seguridad social, formando un círculo vicioso que refuerza las condiciones de pobreza —señala el documento.
Lugar 14 en América Latina
De acuerdo con la Coparmex, México ocupa el lugar 14 en América Latina, entre los países miembros de la OCDE, en cuanto a los Salarios Mínimos, únicamente encima de El Salvador y Nicaragua y sin contar a Venezuela.
El primer lugar es Costa Rica con 532 dólares al mes, seguido de Panamá (500 ), Uruguay (372), Ecuador (366), Guatemala (359), Chile (353), Paraguay (324), Belice (270), Honduras (256), Perú (249), Bolivia (239), Brasil (222), Colombia (217) y México (129).
En El Salvador se paga al mes 118 dólares y en Nicaragua 115 billetes americanos.
Por ello, incrementar el SMG es el primer paso para romper la inercia de la contención salarial que redujo el 72% del poder adquisitivo del SM desde hace décadas, especialmente en los trabajadores más pobres y con menor calificación.
Además, generar condiciones de atracción a la formalidad con mejores niveles de productividad, mayor capacidad de compra y acceso a servicios básicos (educación, salud, vivienda).
También fortalecer el mercado interno frente a los riesgos de medidas que afecten el comercio internacional y las exportaciones.
Texto: Esteban Cruz Obando
Fotos: Cortesía




