Segunda Plana – Punto Medio

NI EN EL GOBIERNO, ni en la empresa, la casa o la escuela uno puede conducirse con base en ocurrencias, es decir, que un día se me ocurra y decreto nuevo impuesto, hoy se me ocurre y ordenó que empiecen a vender un producto nuevo, gasto en un rato el dinero de toda la quincena o saco a los niños a hacer gimnasia al mediodía. La administración de un estado como Yucatán requiere planes bien establecidos, que jerarquicen prioridades y den trato preferente a quienes más lo necesiten, y eso es lo que dijo el precandidato del PRI a la gubernatura, Mauricio Sahuí Rivero, cuando expresó (como le informamos ayer en la página 11) que “seguiremos trabajando juntos, sociedad y gobierno, para mantener el rumbo que tiene como destino lograr el bienestar. La ocurrencia puede propiciar que se pierda lo mucho que hemos conseguido y no lo vamos a permitir”. El aviso debe tener máxima importancia, de manera que quede bien sentado que los políticos ocurrentes, los que hacen promesas sin ton ni son, no son quienes más convienen, cualquiera que sea su partido. Hay un concepto más del discurso de Sahuí Rivero que vale la pena rescatar: “El ejercicio del gobierno debe estar centrado en cambiar vidas, sobre todo de aquellas familias en situación de vulnerabilidad”.
MOTUL PUEDE ser paradigma de lo que sucede en los municipios del interior del estado donde el PRI se esfuerza por lograr unidad, o al menos consenso, para definir a sus abanderados. Un priista que sonaba para ser el candidato a la alcaldía por el tricolor, Mario Peraza Ramírez, se cansó de esperar el respaldo de los mandos partidistas y el acuerdo entre los demás competidores, y ha decidido presentar su candidatura con los colores del Partido Verde Ecologista de México. Según fuentes internas, lo que detonó la decisión de Peraza Ramírez fue el apoyo abierto que una dirigente municipal dio a un grupo de aspirantes a la candidatura que amenazaron con desertar si Peraza era el elegido. El nuevo disidente ha dicho que confía en lograr la alcaldía con los cuadros que desde hace tiempo ha formado, y que la opción de transitar a las filas del PVEM no es nada nuevo entre políticos que se formaron como tricolores.

 

Por Gínder Peraza

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