En poco tiempo la pesca del mero entrará en veda por dos meses, ante esto el titular de la Secretaría de Pesca y Acuacultura de Yucatán (Sepasy), Rafael Combaluzier Medina, reconoció que en cada temporada se reduce de manera significativa la captura de esta especie, lo que disminuye de una forma importante la biomasa del producto y pone en riesgo la actividad que sostiene la economía de miles de pescadores.
“En el mero sí hay una baja anual, se pierden, aproximadamente, unas 600 toneladas cada año. Entonces, es un tema federal que estamos platicando con la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca), para ver que otras medidas se pueden tomar”, externó.
El titular de la (Sepasy), informó que la captura del mero concluirá con una captación de unas 4 mil 700 toneladas, con una derrama económica que alcanzó hasta 200 pesos por kilo de la especie, ingreso que generaron los hombres de mar.
“Dos temas que se tienen que analizar, lo hemos estado platicando con la Conapesca, las autoridades federales y con el Instituto Nacional de Pesca (Inapesca), que son finalmente los que lo dictan, que es poder ampliar la veda y crecer la talla mínima”, apuntó.
Oficialmente, la veda del mero inicia el 1 de febrero, tiempo en el que los pescadores no podrán aprovechar esta especie, regresando a la actividad el 1 de abril.