Suicidio de niño de 10 años sacude a los ticuleños

El padrastro del pequeño lo halla colgado cuando él regresa de su trabajo; Lo baja, pero ya había fallecido

Un niño de apenas de 10 años se quita la vida en Ticul, suceso que golpea no únicamente a la familia sino también a los pobladores, ya que este problema ha tenido un aumento durante la pandemia.

Los hechos sucedieron en la calle 9 B X 34 del fraccionamiento de los Maestros.

Su padrastro José Valerio Ch. Ch., de 71 años de edad, fue quien encontró el cuerpo colgado, luego de regresar de su parcela. La mamá del niño (Gloria Esther, A. L) tiene 34 años de edad.

El infante se quitó la vida en el interior de su vivienda, de apenas 10 años de edad el niño R.E. B. A. era conocido en su colonia, sus compañeros de escuela se extrañaron con la triste noticia.

Se desconoce los motivos por el cual el infante llegó a tomar la fatal decisión.

Los hechos sucedieron a las 13:00 horas de la tarde de ayer, hasta el lugar de los hechos en él fraccionamiento Magisterial llegaron elementos de la policía municipal y estatal quienes acordonaron el área.

Elementos de la policía de investigación  de la fiscalía llegaron momentos después para elaborar un reporte de hechos, Semefo, llegó minutos antes de las 4:00 de la tarde para levantar el cuerpo sin vida para realizar la necropsia de ley.

De acuerdo a un reporte de la Encuesta Nacional de Salud (Ensanut) señaló que las muertes por suicidio de niños, niñas y adolescentes superó tres veces las muertes por covid-19 durante 2020 advirtió el Sistema de Protección de Niñas, niños y adolescentes (Sipinna) en el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio.

De esta forma, durante 2020 mil 150 niñas, niños y adolescentes decidieron suicidarse, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud (Ensanut) en un promedio de tres por día, mientras que los decesos por covid-19 en el periodo referido fue de 392 casos.

Se recomienda pedir ayuda profesional cuando se note a una persona deprimida y que da comentarios negativos.

Texto y foto: Bernardino Paz Celis

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