Los panaderos apuestan a ofrecer sus productos a las puertas de los domicilios; para las fiestas decembrinas, fueron sobre pedido
TICUL.- Un panorama incierto es el que actualmente están atravesando las panaderías locales, por el aumento en los precios de la materia prima y la lenta actividad económica provocada por las condiciones en las que se encuentra la pandemia del coronavirus.
Sin embargo, los días festivos como el Día de Muertos y Los Reyes Magos, con la rosca, vinieron a traerles a los panaderos un poco de luz al final del túnel.
Aunado a las bajas temperaturas que se han presentado en las últimas semanas, lo que ha estimulado que la población compre un poco más de pan, para acompañar el café o chocolate caliente y reducir los efectos del frío.
Una de las panaderías en el municipio de Ticul, registró un importante récord de ventas, con 5 mil roscas, las cuales tuvieron un costo de entre los 100 y 200 pesos.
Miguel Pino Ojeda, dueño de la panadería “El Buen Samaritano”, señaló que ha trabajado el pan desde hace cinco décadas, por lo que ha logrado el reconocimiento de vecinos de este municipio, e incluso en el sur del estado.
Cabe destacar que, el alcalde Rafael Montalvo Mata compró más de mil roscas para repartir, incluso hubo encargos que se llevaron hasta la ciudad de Mérida.
Las panaderías esperan que las temperaturas bajas estimulen el consumo de pan dulce y las barras, las cuales van de cuatro a cinco pesos.
Como hemos informado, Jorge Cardeña Licona, presidente de la Cámara de Comercio en Pequeño manifestó que en plena “cuesta de enero” se esperan nuevos aumentos de precios, que ya les han anticipado los proveedores.
Por ejemplo, dijo, “los panificadores ya tuvieron dos alzas lo cual les perjudicó mucho, la mayoría opto por comprar hogazas y pan para tortas, incluso hasta el pan francés, en vez del pan para sándwich, que es el que más se vendía en las tiendas, optaron por lo más barato”.
Texto y foto: Bernardino Paz Celis
