Todo lo bueno se logra con la ayuda del Espíritu Santo: Rodríguez Vega

El arzobispo de Yucatán pide por la paz en varios países, principalmente en México, por los asesinatos que se presentan; exhorta a tener más entendimiento y respeto, además de dejar de lado el deseo de venganza

A celebrarse el Día del Pentecostés, el arzobispo de Yucatán, monseñor Gustavo Rodríguez Vega, resaltó la importancia del Espíritu Santo, “ya que nadie puede hacer algo bueno si no es con la ayuda del Espíritu Santo, todas las actividades, carismas y ministerios se realizan por el Espíritu Santo”.

Rodríguez Vega agradeció que hayan cesado las hostilidades entre Palestina e Israel y la breve guerra, “pedimos porque el espíritu de la paz por nuestros hermanos de Colombia, también en México urge porque han asesinado a políticos, hay que entendernos y respetarnos, el que respira venganza no tiene el Espíritu de Dios”.

El arzobispo recordó que el Pentecostés era una fiesta, significa 50, y combina la Resurrección y asunción del Señor “era una fiesta judía era después de la Pascua, se hablaba lenguas distintas, María ya había recibido al Espíritu Santo 33 años antes, por lo que en el año de la muerte de Jesús para esta fiesta era especial ya que a las nueve de la mañana se notaban los signos de la llegada del Espíritu Santo”.

Asimismo, el prelado recordó que muchos siglos antes con la soberbia de los que construyeron la torre de Babel, dejaron de entenderse porque el Señor confundió su lengua, en cambio ahora la humildad lleva a la unidad y que se entiendan.

“El salmo es el 103, envía tu Espíritu a renovar la tierra, la renovación se logra cuando nos dejamos renovar por el Espíritu”, expresó´.

Rodríguez Vega indicó que la segunda lectura del primer libro a los Corintios, resalta la obra del Espíritu en cada uno de nosotros.

“En el evangelio de San Juan se presenta el Resucitado manifestándose vivo en medio de los apóstoles, ofreciendo su paz, Jesús sopló sobre ellos y les dijo reciban al Espíritu Santo, el don del Espíritu, nos da la vida con la exhalación, el hecho de soplar sobre los apóstoles, nos remonta a Génesis, cuando Dios creó al hombre”, manifestó.

Asimismo, señaló que es importante la mediación de los apóstoles porque ellos reciben el soplo y les da el poder para perdonar los pecados del mundo, “con el Espíritu Santo y sus siete dones se tiene todo para una vida cristiana, se tiene entendimiento lo que acontece en el mundo o en el alrededor, consejo, ciencia para ir más allá de los sentidos y razonamiento humano nos manifiesta, fortaleza, piedad para doblar la rodilla y el corazón ante el hermano de Dios y el temor de Dios para dimensionar para saber quien nos ama, ya que sólo Él es grande”, argumentó.

También pidió que tengamos muy presente al santo Espíritu para que nos fortalezca para vencer al pecado.

El Espíritu Santo es factor de unidad para todos cuantos lo reciben de corazón, pues lleva con humildad a reconocer la grandeza del Redentor, y de su amor por los cristianos. “En torno a Cristo podemos reconstruir la unidad de las familias y de todos los grupos humanos”, expresó.

Texto: Darwin Ail

Foto: Cortesía