Esta guía comienza a ser aplicada en urbes que cuentan con una red importante de ciclovías, como Ciudad de México, Guadalajara, San Luis Potosí, Culiacán, Chihuahua, Pachuca y Mérida
Uno de cada cinco hogares en el país cuenta con una bicicleta como medio de transporte, es decir, un promedio del 21.2%, pero ese porcentaje aumenta a 39.4% en Yucatán, 36.7 por ciento en Guanajuato o 31.8% en Tlaxcala, según reporta el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En ese contexto, en conjunto con Mapasin, una organización con sede en Culiacán, Sinaloa, que trabaja en temas de movilidad, y Estrategia Misión Cero (EMC), programa de la empresa Cementos Mexicanos (Cemex) enfocado a la seguridad vial, se creó un manual de evaluación de calles seguras en México, con el objetivo de proteger la vida de ciclistas y reducir riesgos de accidentes de tránsito.
Este manual, el cual se terminó a principios de este mes, es aplicado en las urbes que cuentan con una red importante de ciclovías, como Ciudad de México, Guadalajara, San Luis Potosí, Culiacán, Chihuahua, Pachuca y Mérida.
Sergio Andrade Ochoa, enlace nacional de Estrategia Misión Cero explicó en entrevista a Peninsular Punto Medio que este documento evalúa qué calles son seguras para ciclistas, además de ayudar a salvaguardar la integridad de quienes pedalean como método de transporte o por recreación, con el fin de evitar muertes y lesiones graves por hechos de tránsito.
“No sólo contempla la seguridad, también llama a la reflexión y concientización del ciclismo como un sistema de movilidad urgente ante la crisis climática, motivo por el cual se requieren una serie de políticas que rediseñan los espacios públicos adecuados para este medio de transporte, como disminuir las muertes por siniestros viales al gestionar la velocidad vehicular en las ciudades”, explicó el estratega
Indicaron que, con el apoyo de colectivos, organizaciones civiles, académicos y colaboradores, Mapasin y EMC establecieron una metodología enfocada en: la seguridad de las ciclovías en el espacio público.
“El estudio se realiza basado en indicadores de infraestructura presente o ausente, su funcionalidad, los obstáculos a los que se enfrentan las bicis, el exceso de velocidad y peligro que representan los vehículos motorizados, entre otros aspectos”, añadió.
RESULTADOS EN MÉRIDA
Por su parte, Freddy Moo Mendoza, enlace operativo regional de EMC en el Sureste del país, explicó que en la capital yucateca se pudo efectuar el análisis basado en este manual en zonas como la calle 69, con rumbo hacia el municipio de Kanasín, así como en la avenida Colón.
Señaló que uno de los temas que se observaron durante estos ejercicios fue referente al tema del mantenimiento de la infraestructura ciclista y el alumbrado público.
“Cuando transitamos en bicicleta siempre es importante tener iluminación de los espacios, para evitar accidentes; también encontramos otros obstáculos como son los baches, encharcamientos y rejillas en mal estado”, señaló.
Otras de las condicionantes de algunas vías, añadió, es la mezcla de tránsito y vehículos pesados, por lo que se debe manejar con precaución, sin embargo, se espera que con la aplicación de este manual en otras calles que serán objeto de estudio se pueda lograr aterrizar políticas públicas que logren el objetivo de reducir al 50% la probabilidad de que los ciclistas sufran un accidente de tránsito.
“Todo este proceso de las ciclovías fue resultante de la pandemia, el cual requerirá mejoras constantes. Lo que nosotros evaluamos tiene indicadores en donde se van valorando todas estas variables a considerar. Al final observamos que el estado actual de las vialidades en Mérida puede de ser un indicador importante a considerarse como un factor de riesgo para los ciclistas, ya sea por el ancho de estas o las características con las que están trazadas las ciclovías, las cuales podrían generar algún hecho de tránsito en su momento. Con esta metodología buscamos evaluarlas y a través de la participación del estado, la sociedad civil y la academia poder generar propuestas que garanticen la seguridad vial”, explicó.
Mencionó que a pesar de que en la península se cuenta con presencia de colectivos, universidades, asociaciones de colegiados y demás que se han adicionado a esta estrategia, esperan que más personas y agrupaciones ciclistas se sumen a la causa.
“Queremos iniciar evaluaciones de mayor alcance en las ciudades, para que con ello se busquen aplicar mejores estrategias y mejores documentos de diagnóstico, y hacer ese acercamiento con las autoridades para capacitarlas y sean ellos mismos que aprovechen esta herramienta como algo que sume a sus futuros proyectos de movilidad ciclista”, anotó.
Manifestó que esperan que los colectivos se apropien del manual, pues comentó que el objetivo es que ellos lo utilicen para poder evaluar las calles por las que transitan e ir sumando mayor información.
Según la pirámide invertida de la movilidad, creada en 2011 por Bicycle Innovation Lab, caminar y transitar en bicicleta se priorizan por encima de las otras modalidades, debido a los amplios beneficios a la salud, la economía, el medio ambiente, entre otros.
El manual, de 58 páginas, está disponible para descargarse de manera gratuita en www.mapasin.orgy en www.estrategiamisioncero.mx.
MÉRIDA, REFERENTE NACIONAL DE CICLOCIUDADES
En este contexto, hay que recordar que la capital yucateca se colocó como una de las principales ciudades del país que promueve el uso de la bicicleta como medio de transporte, además de carriles de circulación para su uso, según el Ranking Ciclociudades 2021.
Este estudio, que es elaborado por el Instituto para la Política de Transporte y Desarrollo (ITDP, por sus siglas en inglés) señaló que, en comparación al año pasado, Mérida progresó con respecto a 2020, ya que pasó de la séptima a la segunda posición, por encima de Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara, gracias a las medidas puestas en marcha por el Ejecutivo mediante el Instituto de Movilidad y Desarrollo Urbano Territorial (Imdut), en coordinación con el Ayuntamiento de Mérida.
Las autoridades estatales informaron que el ITDP destacó que la capital yucateca es ejemplo en cuatro ejes: planeación urbana, con el 89% de los puntos alcanzados; otros incentivos (rubro que incluye las estrategias antes mencionadas), con 75%; regulación, con 65%, y capacidad institucional, con el 63%.
Finalmente, hay que puntualizar que el Ranking Ciclociudades se elaboró por primera vez en 2013 y desde 2018 se ha actualizado de forma anual, con el objetivo de dar a conocer los avances de las ciudades mexicanas en políticas de movilidad en bicicleta e identificar las áreas de oportunidad en la materia.
Texto y fotos: Andrea Segura